Llega el nuevo año y, como siempre, el calendario de la taberna Squirrel´s, de Corvallis, Oregón, USA, que se encarga de recoger y enviarnos Guy Wood.
Y con el calendario de la ardilla, mis deseos que el 2017 os sea propicio.
sábado, 31 de diciembre de 2016
jueves, 29 de diciembre de 2016
La final del Falla de 1995
El 10 de febrero de 2012 Rafael Pastrana publicó un artículo en el suplemento "Diario del Carnaval", de Diario de Cádiz, donde contaba que, en la final del concurso del año 1995, hubo una supuesta conspiración para que en la modalidad de comparsas no ganara "Los Charrúas", en beneficio de "El Brujo", implicándome a mi, que era el presidente del Jurado ese año, en el intento de marrullería.
Casi una semana después, un miembro del jurado me contó lo que decía Pastrana -yo no había leído el artículo en su momento-, y tras la lectura mandé una nota a la dirección del periódico que decía:
"Por indicación de un amigo, acabo de leer, hoy día 17 de febrero, el artículo de Faly Pastrana, publicado el día 10 y titulado "Charrúa-El Brujo". Tras su lectura, y como presidente del jurado de ese año, concluyo que a Rafael Pastrana Guillén le falla gravemente la memoria y, en consecuencia, lo que dice falta a la verdad. Sólo con la autorización de las personas a quienes menciona, y degrada en su escrito, contaré lo que ocurrió, que en poco se parece a su versión".
Como no hubo respuesta, la cosa quedó ahí, hasta que hace unos días, a través de un mensaje, me llega un enlace de la web codigocarnaval.com, donde, en un artículo publicado el 4 de noviembre pasado con el título "El fallo del jurado entre Charrúas y El Brujo", vuelven a repetir la versión de Pastrana, indicando de nuevo que el presidente del Jurado, junto con el concejal, trataron de impedir la victoria de Quiñones.
Por eso retomo el asunto, para decir que no es cierto, que Pastrana no contó la verdad, seguramente por que le falló la memoria, pues no hay que olvidar el tiempo transcurrido, 17 años, cuando Pastrana escribió el artículo.
No sé si Rafael tiene papeles que acrediten lo que decía, pero yo guardo una carpeta con copia de todo lo que aconteció durante el concurso de 1995, y me reafirmo en que lo que escribió Pastrana en febrero de 2012 y repiten ahora en codigocarnaval.com, no es verdad.
Es cierto que la puntuación se hacía a lápiz y, una vez hecha la primera anotación, se comentaba el resultado y yo, como presidente -que no puntuaba-, en el mismo palco preguntaba a los vocales si estaban de acuerdo con lo anotado y tras su ratificación retiraba las fichas que quedaban bajo mi custodia. Nadie modificó, ni pudo modificar nunca, una puntuación sin la presencia de los tres miembros de cada modalidad de agrupaciones. Insisto, con el acuerdo unánime de los vocales del jurado, las posibles correcciones se hacían al momento y en su presencia, como alguna que se hizo a petición de Pastrana, con el consenso del resto de vocales.
Este proceso fue cada vez más riguroso, sobre todo desde que, en la fase preliminar, tras comprobar la baja puntuación de un conocido autor, advertí a los vocales que no pasaba a la siguiente fase; me sorprendió tanto la respuesta, que desde ese momento me hice el firme propósito, que cumplí, de que allí nadie alteraría un resultado, por lo que una vez consensuada la puntuación, nadie la modificó, y mucho menos "de cortinas para adentro".
De todo lo narrado por Pastrana si hay algo que es cierto: al concejal le gustaba más "El Brujo", pero era una opinión personal que yo conocía, sin que supusiera ningún tipo de presión para modificar el resultado. De hecho, cuando la noche de la final el jurado se reunía a deliberar, impedí la presencia de nadie ajeno al jurado en la sala, incluyendo al concejal, al que le pedí antes de comenzar la deliberación que saliera. Posteriormente, le pedí al informático que procesaba las puntuaciones que solo hiciera una copia del resultado, que guardé yo, pese a que se tenía por costumbre adelantar el resultado a un conocido periodista, lo que me acarreó alguna que otra incomodidad, pero en 1995 todo el mundo, medios de comunicación y público, conoció al mismo tiempo el resultado.
Fue, sin dudas, la final más corta que se recuerda. Y, desde entonces, no he vuelto a pisar el Falla durante concurso, pese a que se me siguió ofreciendo una credencial en los años siguientes.
martes, 27 de diciembre de 2016
¿Dónde queda el laicismo del gobierno municipal?
¡No me lo puedo creer!
Leo en La Voz de Cádiz que el gobierno municipal presidido por José María González Santos, del que forma parte Martín Vila, como primer teniente de Alcalde y delegado de Urbanismo -en el que ambos, como el resto del equipo, presumen de laicismo-, va a dedicar una parte del Plan Invierte 2016 -que tiene un total de 340.000 euros- a rehabilitar el mareógrafo del camino del castillo de San Sebastián, para convertirlo en una capilla dedicada a La Galeona.
Me temo que tras el mareógrafo, seguirá la adulteración del sentido de las garitas y las escaragüitas, según un disparatado proyecto que, aprovechando que el río Arillo pasa por Cádiz, se ha colado entre las propuestas del tricentenario y quiere transformar lo que eran lugares claves de la defensa de Cádiz, en capillas.
¿Qué entienden en el gobierno municipal por laicismo? ¿Dónde quedan las declaraciones de los concejales de Ganar Cádiz sobre su actitud ante la religión? ¿Dónde queda el laicismo?
Lo leo y no me lo creo.
Tabernas que me gustan: Ostras Pedrín
Cada vez que voy a Valencia intento ir a Bodega Casa Montaña, pero en el último viaje, con motivo del X Encuentro Internacional de Historiadores de la Prensa, no pude por falta de tiempo, pero cerca de La Nau, sede del congreso, en la calle Bonaire, encontré una buena taberna, Ostras Pedrín.
En un local sencillo, de azulejos blancos, con una barra pequeña en forma dos o tres mesas en la planta baja y otras tantas en un altillo, sirven además de cervezas, buenos vinos, entre los que destacan el godello y el albariño, para acompañar al fundamento de la taberna, las ostras.
Ostras de varias denominaciones, asturianas, valencianas, francesas, del Sol, de Castropol, Guillardeau..., a diferentes precios y servidas por unidad, junto a erizos del Mediterráneo, ahumados, salazones, cortezas de bacalao y latas de calidad, destacando, junto a las ostras, los boulots (caracolas), entre otros aperitivos que se anuncian en la pared.
Servicio agradable y eficaz, buen material y precios ajustados, hacen de Ostras Pedrín una taberna muy recomendable.
En un local sencillo, de azulejos blancos, con una barra pequeña en forma dos o tres mesas en la planta baja y otras tantas en un altillo, sirven además de cervezas, buenos vinos, entre los que destacan el godello y el albariño, para acompañar al fundamento de la taberna, las ostras.
El expositor de ostras. A la izquierda, los boulots y erizos.
Ostras de varias denominaciones, asturianas, valencianas, francesas, del Sol, de Castropol, Guillardeau..., a diferentes precios y servidas por unidad, junto a erizos del Mediterráneo, ahumados, salazones, cortezas de bacalao y latas de calidad, destacando, junto a las ostras, los boulots (caracolas), entre otros aperitivos que se anuncian en la pared.
Cortezas de bacalao
lunes, 26 de diciembre de 2016
Iluminación patrocinada
Me ha sorprendido escuchar a paseantes criticar que Eléctrica de Cádiz haya colgado unos pequeños estandartes, junto a la iluminación navideña que costea.
Comentarios que no son ajenos a la polémica que surgió cuando el ayuntamiento de Cádiz planteó una reducción de luces de Navidad, o que el comercio gaditano podría colaborar con el coste de los exornos, lo que para algunos resultó escandaloso.
Sin embargo, que empresas y comerciantes colaboren con el municipio en los gastos extraordinarios que acarrea la iluminación navideña, no es una iniciativa anticapitalista del alcalde de Cádiz, ni un disparate, antes al contrario es algo común en muchas ciudades del mundo, que en otros países europeos lleva años practicándose, y este mismo año encontramos ejemplos por varios municipios españoles, como Granada, Barcelona
o Valencia
Y para que no digan que es cosa de las nuevas administraciones de esas ciudades, recuerdo que en Madrid llevan años haciéndolo.
Comentarios que no son ajenos a la polémica que surgió cuando el ayuntamiento de Cádiz planteó una reducción de luces de Navidad, o que el comercio gaditano podría colaborar con el coste de los exornos, lo que para algunos resultó escandaloso.
Sin embargo, que empresas y comerciantes colaboren con el municipio en los gastos extraordinarios que acarrea la iluminación navideña, no es una iniciativa anticapitalista del alcalde de Cádiz, ni un disparate, antes al contrario es algo común en muchas ciudades del mundo, que en otros países europeos lleva años practicándose, y este mismo año encontramos ejemplos por varios municipios españoles, como Granada, Barcelona
o Valencia
Y para que no digan que es cosa de las nuevas administraciones de esas ciudades, recuerdo que en Madrid llevan años haciéndolo.
viernes, 23 de diciembre de 2016
La UCA y la investigación sobre el Carnaval
Las investigaciones sobre el carnaval en Cádiz, que hace décadas se circunscribían a lo que hicieron Ramón Solís, Adolfo Vila, Ricardo Moreno y poco más, se multiplicaron a partir de los años ochenta del siglo pasado, y en la nomina de investigadores, a partir de esa década, hay que recordar a Zilbermann, Cuadrado, Barbosa, Villanueva, Acedo, Vázquez, López Prats, Mariscal, los Osuna (Javier y Fernando), etc.
También a partir de los años ochenta, cuando algunos cuestionaban la importancia científica de investigar sobre el Carnaval, en la Universidad de Cádiz se realizaron trabajos sobre la fiesta gaditana, en áreas de conocimiento como la Lengua, la Lingüística, la Literatura, la Historia o la Historia del Arte, lo que conviene recordar ahora, cuando parece que solo en los dos o tres últimos años se ha publicado algo interesante sobre el carnaval en Cádiz.
Por eso, me permito recordar aquí algunas de esas aportaciones realizadas por profesores e investigadores vinculados a la UCA. La lista no es exhaustiva, ni pretende serlo, pues escribo prácticamente de memoria, sin consultar ninguna base de datos.
En esta lista están los trabajos de Víctor Amar, sobre el cine y el carnaval gaditano, además del realizado con Enrique Rodríguez con el título “Los sonidos del Carnaval de Cádiz”. Sobre la iglesia y el carnaval tenemos los trabajos de Pablo Antón Solé, sobre el cura Pedro Gómez Bueno, o los de Arturo Morgado García dedicados al prelado José Mª Rancés y Villanueva (1898-1917) y a la actitud de la Iglesia gaditana frente al Carnaval durante el antiguo régimen
Los aspectos artísticos de la fiesta, fundamentalmente la arquitectura efímera, han sido objeto de la investigaciñón de Juan Ramón Cirici Narváez, que ya en 1983 publicaba “La arquitectura carnavalesca o el arte de las estructuras efímeras”, asunto sobre el que volvió en 1993. Posteriormente trabajó sobre la obra de Antonio Accame, o sobre el coro de Los Anticuarios y su primer premio del año 1905.
Los trabajos sobre la lengua y la literatura en el carnaval gaditano son abundantes. Hay que mencionar, en primer lugar las investigaciones de Pedro Payán sobre la función lúdica del lenguaje carnavalesco, sus aportaciones al léxico, o sus trabajos genéricos sobre lengua y literatura en el Carnaval de Cádiz. En similar línea, Jorge Paz Pasamar publicó "La temática de las coplas del Carnaval", y con Adolfo González un paseo por Cádiz a través de las coplas y otros trabajos lingüísticos. Como hizo Luis Escoriza con “Voces extranjeras en las letras de Carnaval. Principio de identificación”, o Pepe Jurado que investigó gitanismos y los procedimientos, matices y funciones del humor en las letras del carnaval.
Las agrupaciones han sido también objeto de investigaciones, como las de José María Jurado analizándolas en relación al concurso, pero sobre todo, ha prestado atención a las agrupaciones de la calle, y el Carnaval de Cádiz en general, tema que, con especial atención a su potencialidad económica, ha sido objeto de los estudios de Juan Moreno.
A la historia del Carnaval han dedicado sus pesquisas diversos investigadores, como Diana Repeto en la etapa de la Transición española, época que también estudió Yolanda Moreno, quien, preferentemente dedicó atención al control de la fiesta durante el franquismo.
Gonzalo Butrón Prida publicó trabajos sobre el carnaval en el reinado de Fernando VII, época a la que también quien suscribe ha dedicado algunas publicaciones, mientras que Pepe Marchena ha dedicado sus investigaciones fundamentalmente a finales del XIX y primer tercio del siglo XX, dedicando trabajos monográficos a autores señeros, sin que se deba olvidar su interesante "Carnaval de Cádiz: Una historia de coplas"
Y yo mismo, además de trabajar sobre la época fernandina y la etapa isabelina, he publicado dos libros monográficos "Historia del Carnaval de Cádiz" y "El Carnaval secuestrado", además de coordinar varios colectivos.
Pero además, tanto Pepe Marchena como yo hemos dirigido tesis doctorales dedicadas al Carnaval gaditano. Marchena, la de Santiago Moreno Tello sobre el mundo obrero y el Carnaval. Yo, la de Ana Barceló sobre el tipo, y, recientemente, he codirigido en la Universidad de Sevilla la de Estrella Fernández sobre las chirigotas, el concurso y la televisión.
Este es solo, como dije, un rápido repaso de lo que la UCA ha aportado a la investigación sobre el Carnaval. Quien quiera más información, puede consultar los nueve libros de actas de los Congresos de Carnaval que coordiné junto a Antonio Cabrera.
También a partir de los años ochenta, cuando algunos cuestionaban la importancia científica de investigar sobre el Carnaval, en la Universidad de Cádiz se realizaron trabajos sobre la fiesta gaditana, en áreas de conocimiento como la Lengua, la Lingüística, la Literatura, la Historia o la Historia del Arte, lo que conviene recordar ahora, cuando parece que solo en los dos o tres últimos años se ha publicado algo interesante sobre el carnaval en Cádiz.
Por eso, me permito recordar aquí algunas de esas aportaciones realizadas por profesores e investigadores vinculados a la UCA. La lista no es exhaustiva, ni pretende serlo, pues escribo prácticamente de memoria, sin consultar ninguna base de datos.
En esta lista están los trabajos de Víctor Amar, sobre el cine y el carnaval gaditano, además del realizado con Enrique Rodríguez con el título “Los sonidos del Carnaval de Cádiz”. Sobre la iglesia y el carnaval tenemos los trabajos de Pablo Antón Solé, sobre el cura Pedro Gómez Bueno, o los de Arturo Morgado García dedicados al prelado José Mª Rancés y Villanueva (1898-1917) y a la actitud de la Iglesia gaditana frente al Carnaval durante el antiguo régimen
Los aspectos artísticos de la fiesta, fundamentalmente la arquitectura efímera, han sido objeto de la investigaciñón de Juan Ramón Cirici Narváez, que ya en 1983 publicaba “La arquitectura carnavalesca o el arte de las estructuras efímeras”, asunto sobre el que volvió en 1993. Posteriormente trabajó sobre la obra de Antonio Accame, o sobre el coro de Los Anticuarios y su primer premio del año 1905.
Los trabajos sobre la lengua y la literatura en el carnaval gaditano son abundantes. Hay que mencionar, en primer lugar las investigaciones de Pedro Payán sobre la función lúdica del lenguaje carnavalesco, sus aportaciones al léxico, o sus trabajos genéricos sobre lengua y literatura en el Carnaval de Cádiz. En similar línea, Jorge Paz Pasamar publicó "La temática de las coplas del Carnaval", y con Adolfo González un paseo por Cádiz a través de las coplas y otros trabajos lingüísticos. Como hizo Luis Escoriza con “Voces extranjeras en las letras de Carnaval. Principio de identificación”, o Pepe Jurado que investigó gitanismos y los procedimientos, matices y funciones del humor en las letras del carnaval.
Las agrupaciones han sido también objeto de investigaciones, como las de José María Jurado analizándolas en relación al concurso, pero sobre todo, ha prestado atención a las agrupaciones de la calle, y el Carnaval de Cádiz en general, tema que, con especial atención a su potencialidad económica, ha sido objeto de los estudios de Juan Moreno.
A la historia del Carnaval han dedicado sus pesquisas diversos investigadores, como Diana Repeto en la etapa de la Transición española, época que también estudió Yolanda Moreno, quien, preferentemente dedicó atención al control de la fiesta durante el franquismo.
Gonzalo Butrón Prida publicó trabajos sobre el carnaval en el reinado de Fernando VII, época a la que también quien suscribe ha dedicado algunas publicaciones, mientras que Pepe Marchena ha dedicado sus investigaciones fundamentalmente a finales del XIX y primer tercio del siglo XX, dedicando trabajos monográficos a autores señeros, sin que se deba olvidar su interesante "Carnaval de Cádiz: Una historia de coplas"
Y yo mismo, además de trabajar sobre la época fernandina y la etapa isabelina, he publicado dos libros monográficos "Historia del Carnaval de Cádiz" y "El Carnaval secuestrado", además de coordinar varios colectivos.
Pero además, tanto Pepe Marchena como yo hemos dirigido tesis doctorales dedicadas al Carnaval gaditano. Marchena, la de Santiago Moreno Tello sobre el mundo obrero y el Carnaval. Yo, la de Ana Barceló sobre el tipo, y, recientemente, he codirigido en la Universidad de Sevilla la de Estrella Fernández sobre las chirigotas, el concurso y la televisión.
Este es solo, como dije, un rápido repaso de lo que la UCA ha aportado a la investigación sobre el Carnaval. Quien quiera más información, puede consultar los nueve libros de actas de los Congresos de Carnaval que coordiné junto a Antonio Cabrera.
jueves, 22 de diciembre de 2016
Tradicciones
Las croquetas, como todo el mundo sabe, forman parte de las tradicciones gaditanas, que no de las tradiciones.
La foto es de Jorge A.
La foto es de Jorge A.
miércoles, 21 de diciembre de 2016
¿Qué señala?
Sí, ya sé, altura máxima tres metros, pero está en la plaza de Mina, camino de la calle Antonio López, ¿qué limitación de altura hay por ahí?
La foto es de Jorge A.
La foto es de Jorge A.
martes, 20 de diciembre de 2016
El meridiano de Cádiz
Vista parcial del Plano del Puerto de Cádiz, de Vicente Tofiño, de 1789, con el Meridiano de Cádiz señalado.
Con la creación del Observatorio, una de las medidas fundamentales adoptadas fue el establecimiento del Meridiano 0 en dicho Observatorio, conocido desde entonces como el Meridiano de Cádiz. Desde entonces y durante el siglo XIX, el Meridiano de Cádiz fue la referencia fundamental de la cartografía civil y militar española, incluso después de que, en 1884, un congreso internacional propiciado por Estados Unidos acordara que el Meridiano de Greenwich sirviera de referencia internacional. Sin embargo en España se siguió usando como meridiano oficial el de Cádiz -y posteriormente el de San Fernando-, hasta que en 1901 se decidió adoptar el de Greenwich.
Hace unos días la prensa local se hacía eco de la propuesta de Miguel Ramos de señalar en la ciudad el meridiano. No es la primera vez que se hace esta propuesta, como bien recuerda Antonio Cabrera.
El 14 de marzo de 2008 la concejal del PSOE, Marisa de las Cuevas, presentó al pleno una propuesta para que se instalará en la ciudad un recordatorio del Meridiano de Cádiz. En su intervención de las Cuevas citó a don Francisco Ponce como inspirador de la propuesta en un artículo publicado en Diario de Cádiz el mes anterior. La propuesta socialista, calificada de extemporánea por Ignacio Romaní, fue rechazada por la mayoría del PP.
Marisa de las Cuevas no cejó en su empeño, y en julio de 2011, con motivo de la remodelación de la plaza de San Juan de Dios para el Bicentenario de la Constitución de Cádiz, volvió a presentar la propuesta de que se colocara un símbolo recordatorio del Meridiano de Cádiz en la plaza. Presentada la moción socialista al pleno del 25 de julio, en nombre del PP, Romaní contestó que se estaba estudiando.
Y en enero de 2013, con motivo del tercer centenario del nacimiento de Jorge Juan, Marisa de las Cuevas volvía a insistir, también sin éxito, en la colocación de un símbolo que recordase al Meridiano.
Veremos si esta vez la idea prospera.
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La sangría continúa
Cádiz sigue perdiendo población, y a marchas forzadas. Según los datos que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el año 2015, se han perdido 1.549 habitantes, lo que supone unas 129 personas al mes, algo más de 4 al día.
Son casi dos décadas perdiendo población. Desde que a mediados de los años noventa del pasado siglo la población de Cádiz superó los 155.000 habitantes, la pérdida de población ha sido constante, de manera que la cifra oficial dice que la ciudad sólo cuenta con 118.919 habitantes, y no parece que la tendencia descendente vaya a terminar en un futuro cercano.
La noticia viene acompañada de una comparativa, para resaltar que la capital de la provincia es ya la tercera ciudad en número de habitantes, por detrás de Jerez y Algeciras.
Pero sin quedarnos en la anécdota competitiva, hay que profundizar en las razones del despoblamiento, que, fundamentalmente, son dos: el alto precio de la vivienda en Cádiz, muy superior a las ciudades que la superan en población, mientras que se mantiene una alto número de pisos y edificios vacíos; y la falta de empleo, el paro, problema de toda la provincia, que en Cádiz se agravó tras la crisis y el abandono de la ciudad de grandes empresas industriales, como la tabaquera o la aeronáutica, mientras que la economía se centra en el sector servicios y en la estacionalidad de los empleos relacionados con el turismo y la hostelería.
Por eso Cádiz, además de perder población, envejece, pues los que abandonan la ciudad son jóvenes buscando trabajo y una vivienda asequible.
domingo, 18 de diciembre de 2016
Botas de vino en Bonanza
Fantástica imagen del puerto de Bonanza, en Sanlúcar de Barrameda, hacia 1905, con botas de vino, ¿manzanilla?
De la Biblioteca Nacional.
De la Biblioteca Nacional.
"La Curiosidad" en Cádiz
Una buena noticia, que se hacía esperar: ya ha abierto Mauro Barreiro "La curiosidad" en Cádiz, en la calle Vea Murguía, esquina con Veedor, así que le hicimos una visita rápida, tanto, que, en una cena ligera, solo probamos dos platos.
Primero, unos canelones de pularda con bechamel de trufa, una exquisitez de sabores.
Y crujiente de pollo con salsa barbacoa, un plato que gustará a todo el mundo, con un punto de frito estupendo.
Lo acompañamos de Tilenus, un tinto del Bierzo con uva mencía, y Quadis, en nuevo crianza de Barbadillo, con tempranillo, petit verdot, syrah y tintilla de Rota; los dos bastante bien.
Como siempre, Mauro no decepciona. La cosa promete
Primero, unos canelones de pularda con bechamel de trufa, una exquisitez de sabores.
Y crujiente de pollo con salsa barbacoa, un plato que gustará a todo el mundo, con un punto de frito estupendo.
Lo acompañamos de Tilenus, un tinto del Bierzo con uva mencía, y Quadis, en nuevo crianza de Barbadillo, con tempranillo, petit verdot, syrah y tintilla de Rota; los dos bastante bien.
Como siempre, Mauro no decepciona. La cosa promete
sábado, 17 de diciembre de 2016
La cerveza bebida infantil
Tan impensables como el anuncio de Coñac 103, los que recomendaban que se diera de beber cerveza a los niños, como este de Budweiser, en el que se dice que las madres saben que es bueno beber cerveza para pasar una buena noche:
Pero también en España, Cruzcampo para toda la familia.
Y aunque parezca extraño, en el Hospicio Provincial de Sevilla, se repartía cerveza El Águila a los niños allí acogidos en 1933.
Pero también en España, Cruzcampo para toda la familia.
Y aunque parezca extraño, en el Hospicio Provincial de Sevilla, se repartía cerveza El Águila a los niños allí acogidos en 1933.
viernes, 16 de diciembre de 2016
Entradas de protocolo
Debo advertir que hasta el año 1995 acudía al Falla con credencial, pase que me siguieron ofreciendo durante dos o tres años más, pero que, tras agradecer al concejal su deferencia, no utilicé ya en el año 1996, ni los siguientes, por lo que dejaron de ofrecérmelo.
Dicho esto, me parece un acierto y un gesto valiente la importante reducción de entradas de protocolo que ha acordado la Junta del Concurso, evidentemente, con el respaldo municipal.
jueves, 15 de diciembre de 2016
Impensable en la actualidad
Hay anuncios antiguos que, hoy, sorprenden y sería imposible que se publicaran, como éste de brandy de Jerez:
que se permitía "recordar" el Código de Circulación de la época, concretamente, con el artículo 103.
que se permitía "recordar" el Código de Circulación de la época, concretamente, con el artículo 103.
martes, 13 de diciembre de 2016
La UCA y el beato
Las obras del colegio mayor de la UCA han sido adjudicadas, por lo que parece que comenzarán pronto y la universidad quiere que la residencia universitaria entre en funcionamiento en el curso 2018-2019.
Es una buena noticia y, también, un momento adecuado para pensar en cómo se denominará el Colegio Mayor, y yo insisto en que le cambien el nombre.
Un centro universitario no puede llamarse "Beato Diego José de Cádiz", un colegio mayor, en el que residirán estudiantes universitarios, no puede denominarse como quien estuvo en contra de la universidad, del pensamiento y de la ciencia, como recordaba Javier Herrero, que destacó su odio a las doctrinas ilustradas, sus ataques a la labor científica y pedagógica de las Sociedades de Amigos del País y de la universidad -realizando una campaña de especial saña contra la de Zaragoza-, su desconocimiento absoluto en materia histórica y los disparates que divulgó sobre la filosofía y la ciencia de su época.
Hay muchos universitarios y científicos, algunos de ellos que ejercieron en la UCA, para darle nombre al colegio mayor, pero "Beato...", no.
lunes, 12 de diciembre de 2016
¡Tampoco hay que pasarse...!
A veces, quizás demasiadas veces, da la impresión de que el ayuntamiento va a remolque de lo que se comenta y se publica en la prensa, local y nacional. O es eso, o que el gobierno municipal lanza rumores, globos sonda, y en función de la respuesta decide una cosa u otra.
Pasó con el anuncio de supresión de las ninfas el año pasado, y ahí siguen de momento; con las barbacoas, que se irán difuminando lentamente; y ha pasado con las luces de Navidad, que se rumoreó, o se dijo, que no habría o habría menos, y al final las hay, pero con un reparto tan sorprendente, como mal diseñado.
Dos ejemplos. En la plaza de las Flores hay un exceso de luces, tantas, que unas no dejan ver a las otras:
Se han colocado guirnaldas de bombillas en los árboles y exornos lumínicos en la farola central, se han puesto luces sobre un cable de farola a farola y, a poco menos de dos metros, unos macetones con una especie de árbol de luces -con propaganda de la empresa que realiza la instalación-, que prácticamente ocultan las que están detrás. Quizás en las fotos no se ve bien, pero si van a la plaza, comprobarán lo que digo.
Y en la plaza de la Catedral se han recubierto los troncos de las palmeras con guirnaldas de bombillas y, en algunas palmeras, no en todas, sobre las guirnaldas, otro adorno lumínico.
Lo llamativo es que, al menos de momento, hay plazas y calles sin exorno, por lo que podían corregir la sobrecarga que he comentado y repartir luces por otros puntos de la ciudad. Por ejemplo, los macetones, colocarlos en plazas o rincones donde ahora mismo no hay nada. El gasto sería el mismo, y habría más puntos de la ciudad con iluminación extraordinaria.
sábado, 10 de diciembre de 2016
Cirici, personaje del mes
Y ayer se inauguró el Mercado de Arte, que en esta edición está dedicado a Juan Ramón Cirici.
En el acto de inauguración -en la foto-, se reconoció su labor, desde hace décadas, de crítica y difusión del arte contemporáneo en Cádiz.
Por todo ello, sin dudas, Cirici es el personaje del mes.
De reina a diosa, de damas a ninfas.
Vuelven los rumores sobre la supresión, o mantenimiento, de las ninfas del Carnaval, como ocurrió el año pasado cuando se dijo que se suprimían las ninfas y se iba a nombrar un dios del Carnaval, para acompañar a la diosa. Al final, se dejó todo como estaba, por eso este año el gobierno municipal vuelve a las dudas y la ciudad a la rumorología.
Por si sirve de algo, cabe recordar que, salvo algún caso suelto en bailes privados, la creación de la figura de la "Reina de las Fiestas Típicas Gaditanas" y su corte de "Damas de Honor" es reciente, poco más de sesenta años, puesto que la primera reina fue nombrada en 1956, recayendo el nombramiento en María Rosa Abarzuza, apellido de raigambre en la alta burguesía gaditana y de cierta importancia en el régimen de Franco.
Y es que, desde el primer año, las figuras de la "reina las damas de honor", cobraron un carácter protocolario y político indudable puesto que las elegidas, salvo contadas excepciones, eran jóvenes relacionadas por vínculos familiares y afectivos con alguna personalidad del régimen franquista, ya fuera nacional, provincial o local.
La reina y su corte gozaron muy pronto de un protocolo y programa especial, copiados de las ceremonias de los “juegos florales”, de moda en el primer tercio del siglo XX, y que en Cádiz se recuperaron tras la contienda bélica 1936-1939.
La reina era coronada en el salón de Plenos del ayuntamiento, y después salía a saludar a sus “súbditos” desde el balcón principal de las Casas Consistoriales. En su programa se mezclaron los actos reservados a la élite social gaditana, con otros de marcado carácter populista. Por ejemplo, la ceremonia de coronación estuvo reservada a invitados cuidadosamente elegidos entre la buena sociedad gaditana, que asistían a una cena de gala y un baile de honor. Pero también la reina era la encargada de autorizar el comienzo del recorrido de las agrupaciones –que previamente cantaban el himno de las fiestas, “Los duros antiguos”-, realizaba una ofrenda floral a la Patrona, la virgen del Rosario, visitaba los denominados “barrios populares” y repartía limosnas entre los pobres.
A partir de 1961 la ceremonia de entronización se decidió que fuera pública, por lo que desde dicho año se comenzó a levantar un gran escenario para la coronación de la reina delante de la fachada del Ayuntamiento, para que el pueblo pudiera asistir en pleno a la ceremonia, eso sí, tras varias filas de sillas ocupadas, las primeras por el protocolo y los invitados, y las siguientes por quienes pudieran alquilarlas para asistir a la ceremonia.
Tras la coronación, y sin olvidar las fiestas y actos en su honor que se organizaban, el acto cumbre del reinado era la presidencia, desde una carroza, de la gran cabalgata que recorría las calles de la ciudad el primer domingo de las fiestas, desfile que culminaba con la quema del Dios Momo, representación de no se sabe qué, pues no podría representar a un Carnaval prohibido. Tras la quema, se lanzaba un “castillo de fuegos de artificio”.
A partir de 1958 se decidió copiar el esquema de la reina de las Fiestas en menor escala, eligiendo una Reina Infantil -para la que fue elegida el primer año una sobrina del propio alcalde, Mª Antonia Alcántara-, y su correspondiente corte de damas infantiles, con similares características socio-políticas para su elección. Con las niñas se repetía el prácticamente el mismo programa que con la reina mayor, cambiando la cena de gala por una merienda o la entronización en el ayuntamiento, por una fiesta infantil y ceremonia de coronación en el teatro Falla. Posteriormente también la coronación pasó a desarrollarse en el “trono” de San Juan de Dios.
Como en el caso de la reina mayor, la infantil presidía la cabalgata del domingo de Piñata, que culminaba con la quema de la “Bruja Piti”, seguida de los consabidos fuegos artificiales, cerrando así las fiestas anuales.
Así continuó la organización de esta parte de la fiesta hasta las elecciones municipales de abril de 1979 que, tras un pacto de izquierdas, le dieron la alcaldía al socialista Carlos Díaz. En la primera corporación democrática fue nombrado delegado de fiestas el comunista José Mena, que creó una Comisión Ciudadana, consultiva y popular, que decidió que no podía haber reina y damas, pero sin atreverse a quitarlas, las sustituyeron por “Diosa” y “Ninfas”.
Hubo cambios notables, sobre todo por la elección, mediante concurso, de las ninfas y diosa, por la supresión de los banquetes y bailes de gala, o por la proclamación de la diosa, que pasó a realizarse en el tablado de la plaza de San Antonio, pero en lo esencial, se mantuvo el esquema, y así se ha mantenido hasta ahora, con unas ninfas elegidas mediante un concurso que, ciertamente, más parece un certamen de belleza que otra cosa, pero la gente parece que se ha acostumbrado.
Al ayuntamiento actual, al equipo de gobierno que preside José María González, le toca decidir, pero que decidan de una vez por todas -al menos por lo que queda de legislatura-, para que no estemos cada año fomentando una polémica absurda, pues para lo único que sirve es para enrarecer el ambiente, ya de por sí enrarecido, de la ciudad.
En la foto, Maribel Fraga -hija del entonces ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga Iribarne-, reina de las fiestas en 1965.
Los datos proceden de mi libro El Carnaval secuestrado, editado por Quorum en el 2002.
Hubo cambios notables, sobre todo por la elección, mediante concurso, de las ninfas y diosa, por la supresión de los banquetes y bailes de gala, o por la proclamación de la diosa, que pasó a realizarse en el tablado de la plaza de San Antonio, pero en lo esencial, se mantuvo el esquema, y así se ha mantenido hasta ahora, con unas ninfas elegidas mediante un concurso que, ciertamente, más parece un certamen de belleza que otra cosa, pero la gente parece que se ha acostumbrado.
Al ayuntamiento actual, al equipo de gobierno que preside José María González, le toca decidir, pero que decidan de una vez por todas -al menos por lo que queda de legislatura-, para que no estemos cada año fomentando una polémica absurda, pues para lo único que sirve es para enrarecer el ambiente, ya de por sí enrarecido, de la ciudad.
En la foto, Maribel Fraga -hija del entonces ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga Iribarne-, reina de las fiestas en 1965.
Los datos proceden de mi libro El Carnaval secuestrado, editado por Quorum en el 2002.
jueves, 8 de diciembre de 2016
La bandera y el protocolo
No entiendo cómo se le da tanta importancia, hasta convertirlo en noticia durante dos días, a lo que no es más que una anécdota.
Me refiero a la interpretación como falta protocolaria de los "vivas" que dio Juan José Ortiz, al terminar el izado de la bandera española con motivo del día de la Constitución, hasta el extremo de que Cádiz Directo lo convirtió, casi, en la noticia del día.
Me parece una exageración, pero si hay que buscarle tres pies al gato, en mi opinión, lo noticiable fue lo que Ortiz dijo antes, cuando recordó que al izar la bandera el protocolo exige que suene el himno nacional. Ahí si hubo un fallo de protocolo y no lo cometió el concejal del PP. Los "vivas" no son más que una anécdota.
miércoles, 7 de diciembre de 2016
Dijeron que estaría en el 2012
Hace poco más de siete años, a finales de noviembre de 2009 y tras casi dieciocho meses de conversaciones, tres administraciones, tres altos cargos, anunciaban el consenso logrado para arreglar la plaza de Sevilla, de manera que en el 2012, el año del Bicentenario de la Constitución de 1812, estuviera ya en funcionamiento la nueva estación de autobuses -que, de forma incomprensible, a día de hoy permanece cerrada mientras se desarrollan kafkianas conversaciones con ADIF-, una zona de ocio en la estación de 1905, el parque de la muralla -en la zona de aparcamientos que ADIF se niega a devolver a la ciudad-, el arreglo de la carretera industrial...
De los tres gestores que firmaban el acuerdo, Teófila Martínez, Rosa Aguilar y Antonio González, solo la primera no ocupa ya cargo de gran relieve, ya que Martínez suscribió el plan consensuado como alcaldesa de Cádiz. Sin embargo, Rosa Aguilar que por entonces era consejera de Obras Públicas, sigue en la Junta de Andalucía, ahora como consejera de Cultura; y Antonio González, entonces presidente de ADIF, es ahora director general de la Agencia IDEA, que depende de la Junta de Andalucía.
Da la impresión de que la Junta premia la incompetencia, pues no se debe olvidar que los principales responsables del atasco de la plaza de Sevilla son la Junta y ADIF. El ayuntamiento de Cádiz, primero con Teófila Martínez, ahora con José María González a la cabeza, está condicionado por la incompetente gestión del ejecutivo andaluz en este asunto y el maltrato de la empresa de infraestructuras ferroviarias con la ciudad.
La foto me la envió Jesús.
De los tres gestores que firmaban el acuerdo, Teófila Martínez, Rosa Aguilar y Antonio González, solo la primera no ocupa ya cargo de gran relieve, ya que Martínez suscribió el plan consensuado como alcaldesa de Cádiz. Sin embargo, Rosa Aguilar que por entonces era consejera de Obras Públicas, sigue en la Junta de Andalucía, ahora como consejera de Cultura; y Antonio González, entonces presidente de ADIF, es ahora director general de la Agencia IDEA, que depende de la Junta de Andalucía.
Da la impresión de que la Junta premia la incompetencia, pues no se debe olvidar que los principales responsables del atasco de la plaza de Sevilla son la Junta y ADIF. El ayuntamiento de Cádiz, primero con Teófila Martínez, ahora con José María González a la cabeza, está condicionado por la incompetente gestión del ejecutivo andaluz en este asunto y el maltrato de la empresa de infraestructuras ferroviarias con la ciudad.
La foto me la envió Jesús.
martes, 6 de diciembre de 2016
lunes, 5 de diciembre de 2016
¿Machista?, mejor nauseabundo
No conocía la existencia de un personaje que se hace llamar Maluma, hasta que he leído un artículo que transcribe parte de una de sus letras, calificando, con razón, al personaje de machista y misógino, y denuncia que Telecinco lo lleve a su programa "La voz", pues como dice la autora, es incomprensible que se le de publicidad en un programa que quiere promocionar la buena música. Se puede leer el artículo, y ver un video, aquí.
He buscado la letra de la canción "Cuatro babys", pero me niego a transcribirla, es una absoluta falta de respeto a la mujer, y creo que lo de machista y misógino se queda corto, a mi me parece una letra nauseabunda.
domingo, 4 de diciembre de 2016
Buen Cuchareo
Estuvimos en la primera cita de Cuchareo convocada por la Taberna La Manzanilla, y la experiencia fue muy buena, faltando solo poco más que cambiar dos o tres vinos para que fuera excelente.
Que, en la opinión de quien escribe -por supuesto subjetiva y discutible- no se lograra la excelencia, se debió a la bondad de quienes cedieron a que se sirvieran vinos que, con la pretensión de la defensa de lo natural y espontáneo, no alcanzan más allá del nivel de unos mostos más o menos refinados.
Pero esto no obsta para concluir que la tarde-noche del jueves día 1 de diciembre, fue una auténtica gozada, en la que pudimos disfrutar de los excelentes vinos de la Taberna La Manzanilla, la muy buena cocina de Eduardo Pérez, responsable de la Taberna Ambulante Awita, además de los vinos, alguno mejor que otros, de Alba Viticultores.
Y vamos con la degustación.
Tras un mosto sanluqueño, que ha pasado en barril un año en la Taberna La Manzanilla, y sirvió de introducción al resto de los vinos, probamos una versión, logradísima, de papas con chocos, donde los chocos se habían cambiado por puntillitas y las papas por ñoquis de patatas, muy bueno (no hay foto).
Seguimos con un arroz con galeras, plato en el que, pese a que se ve la galera en la foto, después se diluye, aunque la intensidad de su sabor se nota.
A continuación, el plato que más me sorprendió: un esparragao con habas crudas y medio tronco de alcachofa. El magnífico majao que se suele hacer para los espárragos trigueros, convertía el plato en todo un acierto.
Después, otro plato que merece la pena: albóndigas de conejo y liebre con lentejas, buenísimo.
El quinto platillo era un menudo con todos sus avíos -Eduardo avisó de que la morcilla tenía más canela de la que él pensaba, pero no entorpecía el sabor- al que le había añadido pulpo, tembién con muy buen resultado.
Y de postre, un chocolate con membrillo y nata, que, como no soy nada dulcero, no me atrevo a calificar, pero no era empalagoso, me gustó.
Una buena noche, una buena cena, con el único hándicap, como decía al principio, de que algunos vinos no tenían el nivel esperado.
La próxima cita es el 8 de diciembre, en la taberna La Manzanilla, si pueden, no se la pierdan.
Que, en la opinión de quien escribe -por supuesto subjetiva y discutible- no se lograra la excelencia, se debió a la bondad de quienes cedieron a que se sirvieran vinos que, con la pretensión de la defensa de lo natural y espontáneo, no alcanzan más allá del nivel de unos mostos más o menos refinados.
Y vamos con la degustación.
Tras un mosto sanluqueño, que ha pasado en barril un año en la Taberna La Manzanilla, y sirvió de introducción al resto de los vinos, probamos una versión, logradísima, de papas con chocos, donde los chocos se habían cambiado por puntillitas y las papas por ñoquis de patatas, muy bueno (no hay foto).
Seguimos con un arroz con galeras, plato en el que, pese a que se ve la galera en la foto, después se diluye, aunque la intensidad de su sabor se nota.
A continuación, el plato que más me sorprendió: un esparragao con habas crudas y medio tronco de alcachofa. El magnífico majao que se suele hacer para los espárragos trigueros, convertía el plato en todo un acierto.
Después, otro plato que merece la pena: albóndigas de conejo y liebre con lentejas, buenísimo.
El quinto platillo era un menudo con todos sus avíos -Eduardo avisó de que la morcilla tenía más canela de la que él pensaba, pero no entorpecía el sabor- al que le había añadido pulpo, tembién con muy buen resultado.
Y de postre, un chocolate con membrillo y nata, que, como no soy nada dulcero, no me atrevo a calificar, pero no era empalagoso, me gustó.
Una buena noche, una buena cena, con el único hándicap, como decía al principio, de que algunos vinos no tenían el nivel esperado.
La próxima cita es el 8 de diciembre, en la taberna La Manzanilla, si pueden, no se la pierdan.
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