miércoles, 29 de enero de 2020

Fiambre Carnavalesco

Fiambre es la carne asada, cocida o curada, que se puede conservar durante bastante tiempo y se come generalmente fría. Pero fiambre es también una expresión coloquial para designar un cadáver.

Creo que esta segunda acepción es a la que se refiere este curioso grabado, publicado en la revista satírica Cádiz en broma en 1906.

Arriba a la izquierda, un raquítico Hércules -¿representación de Cádiz?- sujeta a dos leones enfrentados. Uno representa la cabalgata, el otro, tan raquítico como Hércules, la consignación económica.

En diagonal, seguramente un político haciendo churros. Debajo de Hércules, Momo anunciando el Carnaval de 1906. El resto de las figuras, disfraces carnavalescos, donde no faltan niños, negros, demonios...

martes, 28 de enero de 2020

24 de enero de 1820, un bicentenario olvidado

Pese al fracasado intento de de sumarse al pronunciamiento de Riego los días 4 y 5 de enero de 1820, como comentábamos en una entrada anterior, Nicolás Santiago Rotalde continuó con sus planes para levantar Cádiz en favor de la Constitución de 1812.
Tras varios días de conspiración, reuniones secretas e intercambios de mensajes con Quiroga y Riego, decidió pronunciarse por la Constitución el 24 de enero. Su plan preveía que, tras el "cañonazo de ánimas" -la señal con la que se avisaba a la población de Cádiz de que las puertas de la ciudad se cerraban-, se arrestaría a los jefes militares de la ciudad, así como a su gobernador. A partir de ahí, desde el cuartel de La Bomba, las tropas leales a Rotalde, ocuparían lugares claves como la plaza de San Antonio, la muralla Real, el baluarte de la Candelaria -para controlar si fuera necesario a la escuadra-, para dirigirse, primero a las Puertas de Tierra y luego a la Cortadura.

Pese a que Rotalde consideraba muy bueno su plan, las dudas y temores de algunos compañeros de armas desembocaron la acción en un nuevo fracaso. Y mientras varios compañeros y vecinos de Cádiz eran detenidos, Nicolás Santiago Rotalde logró salir de la ciudad, por la Puerta del Mar, aprovechando que era "jefe de día" y conocía la contraseña. Tras una azarosa huida por el arrecife, llegó el 28 de enero a la San Fernando, uniéndose al ejército de Quiroga.

Tiempo después, Rotalde publicó un Manifiesto sobre lo sucedido, en el que terminó reivindicando el papel de la ciudad de Cádiz y de sus vecinos, en la lucha por restauración de la Constitución de 1812 y la recuperación de la libertad en España:

Hasta el 24 de enero ninguna población del reino había manifestado su adhesión a las ideas del general Quiroga, y el día 24 de Enero la heroica ciudad de Cádiz fue la primera que pretendió enarbolar el estandarte de la libertad civil. Cádiz con su esfuerzo entre bayonetas y marina, hizo resonar en todo el reino el grito de la Constitución, y Cádiz desde el 24 de Enero despertó el valor amortecido de los españoles y convocó a los pueblos para romper los grillos de la tiranía. Cádiz es sin disputa la primera población pronunciada y siéndolo ¿dejarán de reconocerse los esfuerzos que hicieron y peligros a que han estado expuestos los heroicos patriotas que pretendieron conseguir la libertad Gaditana?.

Como decía Nicolás Santiago Rotalde hace doscientos años, ¿no merecen los vecinos de Cádiz, de 1820, un reconocimiento a su lucha por la libertad? Sin embargo, temo que estamos ante otro bicentenario olvidado.

domingo, 26 de enero de 2020

Albergue municipal

No sé qué pasa en el Albergue Municipal, pero hay papeles como el de la foto por todas partes.

viernes, 24 de enero de 2020

Carnaval en 142

La Revista Cultural 142, que se edita en Barcelona, aunque tiene sus sedes en Sitges y El Puerto de Santa María, ha incluido en su número cuatro una entrevista que me hizo Paco González sobre el Carnaval.
Por lo demás, los contenidos son muy interesantes.

jueves, 23 de enero de 2020

Cádiz, hace cien años

Interesante y curioso plano de Cádiz, de la zona interior y más antigua, sacado de una guía para turistas de 1920.

Como detalle curioso, se señala la localización del "Campo de tiro y football", lo que conocemos en Cádiz como el "Campo de las Balas", donde el Español de Cádiz tuvo gloriosas tardes de balompié.
 

sábado, 18 de enero de 2020

Pin parental

La Constitución de Cádiz, proclamada el 19 de marzo de 1812, establecía en su artículo 368 lo siguiente:
"El plan general de enseñanza será uniforme en todo el Reino, debiendo explicarse la Constitución política de la Monarquía en todas las Universidades y establecimientos literarios donde se enseñen las ciencias eclesiásticas y políticas".

Con ese planteamiento, los constituyentes querían terminar con las enseñanzas parciales, para que todos los españoles tuvieran una educación común e igualitaria.

Los defensores del pin parental, y los que gritan, como Pablo Casado, "mis hijos son míos", no están, todavía, a la altura intelectual de 1812.

Diez camareros por mesa

El ayuntamiento ha ordenado retirar unas 50 mesas de terrazas de establecimientos hosteleros que ocupan -invaden- plazas y calles del casco antiguo de Cádiz. Dice Horeca que con esa medida se pueden perder unos 500 puestos de trabajo, lo que supone que a cada mesa la atendían unas 10 personas. Seguramente, tan nutrido servicio, solo ocurría cuando se sentaban en las terrazas los dirigentes de Horeca.

martes, 14 de enero de 2020

Lo comparto absolutamente

"La desdicha de España es no haber tenido, cuando entró en la vía de las reformas sociales y políticas, un Tercer Estado inteligente, ilustrado y enérgico, capaz de llevar a cabo una revolución como la de 1789, y de gobernar el país por el mismo, y no a través de una monarquía decrépita y de una aristocracia ignorante".
Eugène Poitou, Viaje por España..., 1869.

domingo, 12 de enero de 2020

Máscara y alteridad

Recién llegado, el libro Maschera e alterità recoge las intervenciones del Congreso Internacional de Estudios sobre "El Carnaval y el Mediterráneo", organizado por el Centro Internazionale di Recerca e Studi su Carnavale, Maschera e Satira, y celebrado hace poco más de dos años en Melfi y Putignano. 

Este es el índice del libro.

Y esta la primera página de mi aportación.


Vida amarilla

¡Cuánta razón!

En Jerez de la Frontera.

viernes, 10 de enero de 2020

Llamamiento a la acción

Tras las elecciones de febrero de 1936, el diario El debate, propiedad de la Asociación Católica Nacional de Propagandistas, realizó un llamamiento a los católicos a actuar para salvar a España de la revolución izquierdista.

Ayer, en Diario de Cádiz y otras cabeceras del Grupo Joly, Rafael Sánchez Saus realizaba un "llamamiento a la acción", para arrancar a España de las manos de sus enemigos.

El 18 de julio y los socios del Casino

En la charla que impartí el 10 de diciembre sobre la historia del Casino Gaditano, con motivo del 175 aniversario de su fundación, abordé qué ocurrió con el Casino a partir del 18 de julio de 1936 y en los años posteriores, para explicar que lo más destacado es que el Casino Gaditano dejó de serlo, para convertirse en el Cuartel General de Falange. Hay datos y documentos que así lo demuestran, incluyendo fotos como la que publico, cedida por Carlos A., en la que se ve el edificio del Casino con la simbología falangista.
Expliqué que el 18 de julio, un grupo de falangistas entró, armas en mano, en el Casino Gaditano y se apoderó del edificio, pese a un conato de resistencia por parte de algunos socios que tuvieron que abandonar el Casino. Aunque pocas semanas después, los socios, reunidos en el Círculo Mercantil -no pudieron hacerlo en su sede oficial- "cedieron", por las circunstancias del momento, el edificio a Falange, pronto iniciaron gestiones para recuperarlo, lo que no lograron, y de mala manera, hasta 1944.

Que el Casino era un objetivo de Falange ese infausto 18 de julio no lo digo yo, lo escribió José de Mora Figueroa en su libro Datos para la historia de la Falange Gaditana, 1934-1939, donde expresa con claridad las razones estratégicas para ocupar el Casino, describe la ocupación y el intento de resistencia de los socios, añadiendo que, personalmente, no quería que se mezclara el ideario de Falange con el ambiente político y social del Casino Gaditano.

En el coloquio posterior, José María O., me preguntó que cuántos, de la veintena de falangistas que ocuparon el Casino, eran socios, pues creía que si no todos, una gran mayoría lo eran. Respondí, de memoria, que dos o tres, quizás cuatro, y no iba descaminado.

Aunque Mora Figueroa no indica los nombres de los 20 falangistas que ocuparon el Casino el 18 de julio -uno de ellos abandonó la acción allí mismo-, narra que a los 19 que quedaron se le sumaron 16, y da los nombres de los 35 que, en total, se sumaron golpe militar, cuya relación reproduzco:
Contrastando esos nombres con la relación de socios del Casino Gaditano entre 1844 y 1944, elaborada por Antonio Alarcón, resulta que cinco de ellos eran socios del Casino: José de Mora Figueroa (socio desde 1924), Antonio Puelles y Puelles (desde 1922), Eduardo Iraola (desde 1932), Antonio Díaz de la Jara (desde 1934) -en la relación de socios aparece Antonio Díez de la Jara, por lo que se puede pensar que Mora Figueroa confundió el apellido- y José Joaquín Lahera (1921).

Pero se puede deducir de la narración de Mora Figueroa, que su hermano José no estaba entre los ocupantes del Casino, por lo que hay que concluir que en el momento de la ocupación, como máximo, solo había cuatro socios del Casino entre los falangistas que ocuparon el edificio.     

sábado, 4 de enero de 2020

Cádiz, 4 y 5 de enero de 1820

Cuando el 1 de enero de 1820, Rafael del Riego se pronunció por la Constitución de Cádiz en Cabezas de San Juan, formaba parte de un plan que debía obligar a Fernando VII a jurar la Constitución de forma casi inmediata.

El plan del pro­nunciamiento preveía un triple movimiento de fuerzas a desarrollar en la provincia gaditana, que debería concluir, en pocos días, con la toma de la ciudad de Cádiz, como símbolo de la restauración constitucionalista. Por una parte, Rafael del Riego, desde Las Ca­bezas de San Juan, con el batallón de Asturias y con el de Sevilla desde Villamartín, marcharía sobre Arcos, donde estaba el Capitán General, Conde de Calderón, para detenerlo. Por otra, Antonio Quiroga, con tropas acantonadas en Alcalá de los Gazules –donde Quiroga estaba detenido desde los sucesos del Palmar, en julio de 1819-, a las que se sumarían las que estaban en Medina Sidonia, tenía que marchar hacia San Fernando para prender al Capitán General Cisneros, y después continuar hacia Cádiz. Por último, López Baños, debía quedar en expectativa con las tropas del interior. Los tres ejércitos debe­rían converger finalmente en Cádiz apoderándose de la ciudad y provocar el juramento real.

Pero los acontecimientos no se produjeron como estaba planeado. Mientras que Rafael del Riego inició la salida de Cabezas de San Juan en medio de un fuerte aguacero, cumpliendo con la parte que le correspondía, Quiroga se retrasó en la ejecución del plan, dubitativo sobre el seguimiento de la tropa, hasta que, conociendo el éxito de Riego en Arcos, se puso en marcha hacia San Fernando.

El 3 de enero Quiroga llegó a San Fernando y se apoderó de La Carraca, pero no se decidió a marchar de inmediato hacia Cádiz, como estaba previsto, dando tiempo a Alonso Rodríguez Valdés a organizar la resistencia de la ciudad, enviando a la fortaleza de La Cortadura a Luis Fernández de Córdova, que, en la madrugada del día 4, con poco más de medio centenar de hombres, resistió un tímido intento de aproximación del regimiento de la Corona, que formaba parte del ejército de Quiroga.

Mientras que Quiroga fracasaba en el intento de entrar en Cádiz, Riego seguía ejecutando la parte que le correspondía del plan, llegando a El Puerto de Santa María el día 5 de enero. Ese mismo día, en Cádiz, se produce la fuga del castillo de San Sebastián de un grupo de oficiales detenidos en los sucesos de El Palmar, para unirse a Riego. Y mientras eso ocurría, tras el fracaso de Quiroga en Cádiz, Nicolás Santiago Rotalde, coronel de la guarnición gaditana, intentó un levantamiento constitucionalista en la ciudad, que fracasó al día siguiente, 6 de enero.

El doble fracaso en Cádiz, el de Quiroga de tomar la ciudad y el del levantamiento constitucionalista de Rotalde, obligaron a Riego a tratar de resistir, esperando una reacción en favor de la Constitución, iniciando una larga marcha por Andalucía y Extremadura, que, iniciada en El Puerto de Santa María con unos 1.500 soldados, acabó en Bienvenida, a principios de marzo, con poco más de 300. Mientras tanto, Quiroga resistía en La Carraca y San Fernando.

Por fin, a principios de marzo de 1820, un pronunciamiento en La Coruña, provocó una reacción en cadena que obligó a Frenando VII a jurar la Constitución el 8 de marzo de 1820.

Pero en Cádiz, los acontecimientos no terminaron ahí, como veremos próximamente.

jueves, 2 de enero de 2020

Ayer no empezó una década

Volvemos a lo de siempre, a comentarios callejeros y, lo que es peor, artículos de prensa, que repiten que en 2020 comienza una década. No es así, la segunda década del siglo XXI terminará el 31 de diciembre de 2020. Y la tercera década comenzará el 1 de enero de 2021.

Ocurrió de forma muy generalizada el año 2000, pero a pesar de que se explica, el error se repite. La explicación es tan sencilla como pedirle a los que cometen el error que cuenten hasta 10. Seguro que empiezan por el 1, no por el 0.

Pero todo tiene solución: a partir de ahora los meses comenzarán el último día del anterior. Por ejemplo, febrero comenzará el 31 de enero, marzo el 29 de febrero, abril el 31 de marzo, y mayo comenzará el 30 de abril..., ¿se entiende ahora?

miércoles, 1 de enero de 2020

Hace doscientos años

"España está viviendo a merced de un poder arbitrario y absoluto, ejercido sin el menor respeto a las leyes fundamentales de la nación. El rey, que debe su trono a cuantos lucharon en la guerra de la Independencia, no ha jurado, sin embargo, la Constitución; la Constitución, pacto entre el monarca y el pueblo, cimiento y encarnación de toda nación moderna. La Constitución española, justa y liberal, ha sido elaborada en Cádiz entre sangre y sufrimiento. Mas el rey no la ha jurado y es necesario, para que España se salve, que el rey jure y respete esa Constitución de 1812, afirmación legítima y civil de los derechos y deberes de los españoles, de todos los españoles, desde el rey al último labrador... Sí, sí, soldados, la Constitución. ¡Viva la Constitución!"

Esas palabras forman parte de la proclama con la que, el 1 de enero de 1820 en Las Cabezas de San Juan, Rafael del Riego se pronunció por el restablecimiento de la Constitución de 1812 en España, comenzando el Trienio Liberal, un breve período de libertad en el que Cádiz volvió a tener protagonismo.

Hoy comienza, por tanto, otro bicentenario que debería servir para reflexionar sobre las libertades, los derechos y los deberes ciudadanos, pero parece que, salvo actividades académicas y alguna celebración puntual, no hay mucha intención de hacerlo.