Recientemente un grupo de profesores de distintas Universidades catalanas ha firmado un manifiesto en el que denunciaban la ilegitimidad de las actuaciones de las instituciones de la Generalitat para culminar el proceso de secesión iniciado hace tiempo. En particular, reclamaban a los órganos del Estado que llevaran a cabo todas la actuaciones necesarias (dentro de la ley) para restaurar el orden constitucional y democrático en Cataluña.Como consecuencia de ello, se ha podido detectar una campaña de desprestigio público contra tales profesores. Por un lado, el sindicato de estudiantes soberanista SEPC ha pedido “la dimisión” de Albert Reig, catedrático de ciencia política de la Universitat Rovira i Virgili (URV) de Tarragona. Por otro, algún medio de comunicación (directe.cat) ha publicado el nombre de los docentes, con su fotografía y adscripción universitaria, atribuyendo a los firmantes una ideología de extrema derecha y acusándoles de estar en contra de la democracia. Parece evidente que el objetivo de tales acciones no es otro que estigmatizar a quien se considera un enemigo político.Ante esta grave situación, queremos manifestar nuestro decidido apoyo a que nuestros colegas universitarios en Cataluña, haciendo uso de su libertad de conciencia, puedan expresar respetuosamente pero con plena libertad su discrepancia política. Reclamamos, para ello, que las autoridades políticas y académicas realicen las acciones necesarias para que dicha libertad y la actividad docente estén correctamente protegidas y garantizadas. Hay que recordar, una vez más, que la democracia no consiste en señalar al disidente, sino en asegurar que las minorías puedan expresarse con libertad para que el pluralismo de las opiniones haga posible el debate político.
Manifiesto firmado por muchísimos profesores de diferentes universidades españolas y extranjeras.
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