martes, 5 de abril de 2016

Una estación de autobuses tercermundista


Actualmente, el acceso a la estación de ferrocarril y, sobre todo, el estado de la estación de autobuses solo se puede calificar de tercermundista.

Ni tan siquiera el disparate de la gestión de la plaza de Sevilla -ya saben, el mantenimiento incomprensible de la Aduana que ha torpedeado un buen proyecto urbanístico, todavía pendiente de una solución por parte de la Junta de Andalucía-, permite comprender que la nueva estación de autobuses se haya retrasado tanto, y que, terminada, siga pendiente de su apertura, ahora con la excusa de que hay que poner un ascensor y ¡pensar cómo se va a gestionar!, como si no hubieran tenido tiempo de pensarlo en los meses que han transcurrido desde que se proyectó e iniciaron las obras.

Los gestores de la Junta deben acelerar el proceso, pues no se puede consentir que la llegada a Cádiz, en tren o en autobús, produzca la sensación de estar llegando a una ciudad de los años cincuenta.  

No hay comentarios: