Interesante, enriquecedor, a veces sorprendente por algunas opiniones vertidas por autores y participantes en callejeras, el 23 Congreso Internacional de Carnaval se ha desarrollado con un seguimiento, a veces menos numeroso de lo que hacían presagiar las inscripciones realizadas, pero con una activa participación en los debates y coloquios.
Este es un resumen fotográfico.
Me parece adecuado que se incluya al Oratorio de San Felipe, junto al teatro de las Cortes, en la lista de "lugares de memoria democrática", por su papel durante las Cortes de 1810-1813 y en la elaboración de la primera Constitución española.
Es especialmente importante en el caso del Oratorio, donde, en la actualidad, y para quienes lo visitan, parece obviarse, de manera incomprensible, el papel de San Felipe en el desarrollo de la Cortes y elaboración de la Constitución de 1812.
A quienes regentan ahora el Oratorio, al obispado de Cádiz, habría que recordarle que la Gaceta de Madrid -el antecedente del BOE- publicó el 25 de julio de 1907 la Real Orden por la que se declaraba San Felipe Neri "monumento histórico nacional", e, igualmente, hay que recordarle a los representantes del estado español que el Oratorio, desde hace más de cien años, está bajo la tutela del estado.
La Real Orden del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes explicaba con detalle la causa de la declaración. Tras indicar que la decisión adoptada venía precedida de sendos informes de la Real Academia de la Historia y de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, exponía que el edificio, desde el punto de vista artístico, no merecía "especial mención", que tampoco destacaban las obras de arte que contenía, salvo "La Concepción", de Murillo y "El Padre Eterno" de Clemente de Torres, añadiendo "en cambio ocupa en la Historia un lugar preeminente, pues sirvió de asiento al Gobierno de la Nación y a las Cortés del Reino, que en dicha Iglesia discutieron, sancionaron y promulgaron la Constitución de 1812, verdadero punto de partida de la independencia y libertad de la Patria y base del sistema constitucional moderno", dejando muy claro que por eso se declaraba monumento histórico nacional, y ordenaba que, "sin perjuicio de su actual régimen de conservación y utilización", el Oratorio quedaba "bajo la inspección de la Comisión provincial de Monumentos y la tutela del Estado".
Por tanto, la Real Orden, que incluía los informes de ambas academias, responsabiliza al estado de la conservación y uso del Oratorio, lo que no ocurre en la actualidad. Para que no haya dudas, incluyo aquí la página de la Gaceta de Madrid:
En la plaza de San Antonio nº 10 se localizaba, en el segundo tercio del siglo XX, el reconocido restaurante Alemán, el "único familiar", según decía la publicidad de 1935.
Inaugurado, según referencias que no he podido confirmar, a fines de 1929, fue bastante frecuentado por el público gaditano en los años treinta y cuarenta, pese a las circunstancias sociales y políticas de posguerra.
Precisamente, los acontecimientos políticos debieron obligar a los propietarios a cambiarle el nombre al restaurante. Efectivamente, todavía en 1943 aparece anunciado como "Gran bar restaurante Alemán", pero al año siguiente, en 1944, lo encontramos anunciado como "Bar restaurante Alpino", añadiendo "antiguo restaurante Alemán", indicando además que había sido ampliamente reformado.
Las causas del cambio de nombre parecen evidentes. A fines de 1942 y principios de 1943, el signo de la Segunda Guerra Mundial giró bruscamente, tras las derrotas alemanas en África (batalla del Alamein) y Rusia (Estalingrado), lo que provocó un cambio en la actitud de la dictadura franquista con respecto a Hitler y los aliados. Y no puede ser casualidad que, en ese contexto, el restaurante de la plaza de San Antonio cambiara de nombre.
El restaurante Alpino permaneció abierto, seguramente, hasta finales de los cuarenta o principios de los cincuenta, hemos podido confirmar que en 1954 ya no existía.
Pese a lo que se ha escrito en algún artículo, el restaurante no estaba en la esquina con la calle de la Torre, donde actualmente está la farmacia, ocupaba el local de la finca nº 10, precisamente donde ahora está "Listán, wine, tasca", una taberna con una carta de vinos que merece una visita pausada.
Recordatorio de la muerte de Miguel Primo de Rivera, publicado en Jerez. Las citas incluidas del propio dictador, muy significativas...
Magníficos dibujos de Calvichis con tipos de agrupaciones callejeras; noticias de Diario de Cádiz, libros sobre las callejeras y el Carnaval de la calle y una curiosa y rica selección de libretos y hojillas de la colección de Javi Osuna.
Se puede ver en la Sala de los Libros del edificio Andrés Segovia de la UCA (c/ Dr. Marañón, 3), abierta hasta el 11 de noviembre de 9 a 14 horas. Merece una visita pausada.
Jueves 27 de octubre
15:30. Recogida de material.
