No niego que exista la posibilidad de que haya un maremoto en Cádiz -me consta que hay científicos muy solventes dedicados a su estudio-, ni niego que haya que decirlo, pero tengo la impresión de que se está magnificando el tema, que se está convirtiendo en una noticia recurrente, hasta provocar cierta angustia en la población, lo que debería ser una prevención ordenada y cotidiana por parte de los responsables sociales, sin provocar alarmismos innecesarios.
Después si alguien hace un comentario escéptico sobre la posibilidad de la catástrofe, le llaman irresponsable, pero cuando algunos que se califican así mismos de expertos, dicen categóricamente que el maremoto de 1755 se va a repetir seguro, pues se produce cada 500 o 600 años, más de uno hace la cuenta, como hizo un conocido no hace mucho, y concluyó que tomará precauciones allá por el año 2254, añadiendo "ya os avisaré, si es que estáis por aquí todavía".
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