¿No tienen nada que decir, en la oficina de Urbanismo municipal y la delegación de Cultura de la Junta de Andalucía, sobre la fachada empapelada de la Fundación Cajasol?
El colorido del papel, sobre la fachada del edificio, conocido en Cádiz como la casa de Pemán, es un atentado contra el patrimonio urbano de la ciudad.
2 comentarios:
¡No me lo puedo creer! Hiere la sensibilidad y es de un pésimo gusto ¿no hay normativa municipal para estos egendros?
Me uno a tu protesta, por supuesto y desde la esperanza, espero que se le hagan rectificar.
Amistosamente.
Alguien tendrá que explicar por qué está señora de la Fundación Cajasol puede hacer lo que le dé la real gana en la fachada de un edificio protegido en un espacio de especial visibilidad d la ciudad, porque yo no puedo ni cambiar el color de la pintura del balcón de mi casa.
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