El ayuntamiento de Cádiz semi-peatonalizó la calle Veedor hace tiempo, pero el resultado deja mucho que desear.
Al comienzo de la calle se colocó un bolardo para disuadir a los conductores que circulan por la plaza de San Antonio de entrar en Veedor, pero no son pocos los conductores que hacen caso omiso, especialmente, repartidores y algún que otro taxista, por no mencionar a los motoristas que sistemáticamente ignoran el bolardo.
Y en la confluencia de Vea Murguía con Veedor, se colocó una señal a la que casi nadie hace caso, por lo que por el tramo que va desde dicha confluencia, hasta el Mentidero, circulan constantemente motos y coches procedentes de Vea Murguía.
Por otra parte, la señalética de la esquina induce a la confusión, con una señal que indica que por la calle Veedor se puede circular en ambos sentidos. Hay quien piensa que se puso por los garajes, pero la señal no indica ninguna excepcionalidad.
Pero paralelamente, hay una señal que prohíbe circular en sentido a la plaza de San Antonio, indicando en este caso "excepto vehículos autorizados", posiblemente los usuarios del garaje.
En fin, señalética inútil y confusa.
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