No es ninguna manía, pero tengo tendencia a acumular papeles, a guardar documentación generada en las comisiones y reuniones a las que me convocan y participo.
De la Comisión Nacional y Consorcio del Bicentenario debo tener guardados algo más de mil folios. Y también guardé, hasta ayer mismo, los que recibí de Diputación cuando se preparaba el Tricentenario del traslado de la Casa de Contratación a Cádiz, las propuestas de todo tipo que hicieron instituciones y empresas para la conmemoración, sobre los que emitimos informes y sugerencias, y que, mayoritariamente se quedaron en agua de borrajas.
Tras recordar muchas buenas propuestas que quedaron en nada, lleve al contenedor de reciclaje de papel algo más de trescientos folios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario