lunes, 30 de junio de 2025

Tenía que ser nieta de Pemán

En 1966 la Reina Infantil de las Fiestas Típicas Gaditanas fue Esmeralda Guerrero Pemán, nieta del escritor que vivía en la plaza de San Antonio.

Pero Esmeralda no fue la primera opción en la que se pensó para reina infantil. Gracias a un documento guardado en el Archivo Histórico Municipal de Cádiz, podemos saber que antes  de elegir a Esmeralda, la Comisión de Fiestas propuso a su prima, Carmen del Cuvillo Pemán, posiblemente, por los apellidos de la niña, ya que era una forma de honrar a dos familias gaditanas, los del Cuvillo y los Pemán.

Sin embargo, su abuelo, José María Pemán, le comunicó por carta al alcalde José León de Carranza que la familia consideraba que Carmen era demasido pequeña -6 años recién cumplidos- y, además, tenía una mella, normal en su edad, que, según el abuelo,  "la anula para reina".

En la misma carta de Pemán, Carranza escribió una breve nota, "buscar alguna otra reina". Pero por lo que se ve, no fue complicado, Pemán tenía otra nieta en condiciones de ser reina: Esmeralda Guerrero Pemán, con lo que parte de la primera idea, que fuera una Pemán, se mantuvo. 

De esto y temas similares, hablaremos en el curso de verano "Las Fiestas Típicas Gaditanas (1949-1977): desmontando mitos y leyendas".

El curso cuenta con becas de matrícula.

Más información sobre el curso, las becas y matrícula, AQUÍ

 

2 comentarios:

Casimiro Morcillo dijo...

Estimado Sr.a veces la historia se convierte en cotilleo.Este asunto de correspondencia privada y caprichos de abuelo que siempre fue vecino de Cádiz y
Nunca se instaló en Madrid, para medrar y prosperar como tantos y tantas posteriormente cuando el Régimen murió en un Hospital público.
Y hasta el comentario a pie de página nos presenta al marqués de Villapesadilla como un pragmático personaje.
En resumen hoy igual que ayer perro no come carne de perro.

Máscara Roja dijo...

Al final las figura de las Reinas fueron guillotinadas figuradamente por el Cambio Político.La sustituyó una diosa como retoño al mundo dionisíaco de la Democracia liberal y un brindis a la Revolución francesa que no pudo calar en Cádiz, tan monárquicos ellos en la Constitución.Asi en el 79 se añoró sin saberlo, los cambios del calendario francés y la búsqueda de la Antigüedad para rebautizar cosas.
Hasta que llegó el cabo Kichi con aspiraciones de llego el comandante y mando parar y convirtió a todas mujeres igualitariamente en ninfas, porque no pudo convertirlas en milicianas Carnavalescas.El licenciado en Historia, solo había leído la bibliografía necesaria para convertirse en profesor y la piel curtida para un discurso de vende revoluciones de índole carnavalescas a unos votantes deseosos de un Dios Momo.Puro aire y fuego purificador carnavalescos que es como todo algo efímero.
Hasta que fue rescatado para mayor gloria de la intelectualidad y de la poesía universal como la gran cultura gaditana desde la llegada de los fenicios,