sábado, 9 de abril de 2016

¡Qué ridiculez!


Aunque podamos pensar que estamos curados de espanto, siempre hay alguien que nos demuestra lo contrario.

Leo en Diario de Cádiz que unos colectivos critican al Ayuntamiento por permitir que, en la Casa de la Juventud, un joven investigador imparta una conferencia sobre el toreo en los siglos XVIII y XIX: lo consideran nocivo, pues piensan que es "fomento de la tauromaquia".

Con ese criterio, investigar la represión franquista, es fomento de la dictadura. Ya avisó Nikita Jrushchov de lo peligrosos que son los historiadores.

¡Qué ridiculez! ¡A qué extremos estamos llegando con un desmedido purismo!

1 comentario:

José Manuel Rasco dijo...

Y si se habla sobre las bacanales romanas se están fomentando las orgías y se ofrece una conferencia sobre el acoso sexual se está también fomentando este. ¡Los papeles de fumar deben estar baratísimos! y, así, hasta el infinito y más allá.