ERA lo que cantaba Silvana di Lorenzo en el año 1973, en un estribillo
que añadía, "tan sólo palabras", indicando la vacuidad de determinados
mensajes. El refranero popular tiene una expresión similar, cando dice
"las palabras se las lleva el viento". Pero no debería ser así, sobre
todo cuando se pronuncian como una promesa, o como un mensaje electoral,
porque en esos casos deberían cobrar, prácticamente, carácter de
contrato y, pasado cierto tiempo, recordar si se ha cumplido.
Poco
antes de las elecciones generales de noviembre de 2011, cuando la
crisis ya era evidente para todos, en este mismo periódico se publicó,
el jueves 17, una entrevista con la alcaldesa de Cádiz, en tanto que
Teófila Martínez era la primera candidata del Partido Popular en las
listas para el Congreso de los Diputados. El titular era suficientemente
significativo como proclama electoral: "El partido sabe lo que necesita
la provincia y Rajoy lo va a hacer". Y tras esta declaración
promisoria, en las primeras líneas la entrevistada afirmaba que el de su
partido era un programa "sin nada oculto", afirmación que, como
sabemos, la gestión gubernamental de Mariano Rajoy se ha encargado de
desmentir, por activa y por pasiva. Por ejemplo, Martínez decía que
"vamos a bajar los impuestos", una letanía que medio Partido Popular
reiteraba antes de las elecciones, quizás pensando, angelitos inocentes,
que el IVA no es un impuesto y que por eso se puede subir. Consideraba
la candidata del PP que el paro, que estaba en el 23%, era un problema
gravísimo y que Rajoy, como el propio Mariano había sentenciado, iba a
rebajarlo, adoptando medidas, decía, para que no hubiera despidos en las
empresas; lo que no sabemos es que piensan ambos, Rajoy y Martínez,
tras haber abaratado las condiciones de despido, sobre que el porcentaje
de paro se haya incrementado en más de dos puntos, superando ya el 25%.
Consideraba la alcaldesa que había que fomentar el consumo, pues
"consumir es una máquina de generar empleo", lo que no dijo es que el PP
iba a recortar salarios, pensiones, secuestrar la paga extraordinaria
de los funcionarios y que, todo ello, iba a reducir el consumo, en
perjuicio, sobre todo, de las pequeñas y medianas empresas, que son el
tejido socioeconómico esencial en Cádiz. Y, en la misma línea, Teófila
Martínez aseguraba que las pensiones estaban garantizadas por ley y que
"no es potestativo de un gobierno destruirlo" e, insistía, "la
educación, la sanidad, las pensiones están garantizadas por ley en
nuestro país". Lo que no dijo la actual diputada, y candidata a premio
de los periodistas parlamentarios, es que el gobierno de su partido no
cumpliría lo estatuido.
Tras todo lo afirmado y prometido,
incumplido de inmediato por la gestión gubernamental del PP, que
repitiera lo de la terminación del segundo puente antes del final de
2012, o que para esa misma fecha llegaría la Alta Velocidad, es minucia
compartida con el gobierno socialista anterior, que decía lo mismo. Al
fin y al cabo, son palabras, palabras, palabras…
Publicado en Diario de Cádiz, 15 de diciembre de 2012
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