Mostrando entradas con la etiqueta Pablo Iglesias. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Pablo Iglesias. Mostrar todas las entradas

viernes, 10 de febrero de 2017

Las travesuras de Errejón

Foto de Europa Press

De la entrevista a Pablo Iglesias en El País, se ha destacado la regañina a Iñigo Errejón. El líder de Podemos, que aspira a repetir, dice, en más de una ocasión, que Iñigo Errejón se ha equivocado y debe rectificar.

Pero, en mi opinión, hay dos cosas que llaman más la atención. Por una parte, con la autosuficiencia habitual en Iglesias, el discurso catastrofista, la amenaza de dimitir si no gana, el aviso de que, o le dan la razón en todo y todo el poder, o se marcha.

Y por otra, todavía más sorprendente, la declaración sobre la renuncia a la transparencia absoluta, el aviso de que hay cosas que se discuten en el Consejo Ciudadano que no deberían ser conocidas, que no deberían salir a la luz pública, a la postre, que todo no tienen por qué saberlo los militantes y simpatizantes.

sábado, 14 de enero de 2017

El sacrificado héroe


En más de una ocasión, mejor, en decenas de ocasiones, he repetido en clase una idea que leí en La tarea del héroe, un excelente libro de Fernando Savaterel héroe es un ser precioso e imprescindible el día de la revolución, pero hay que fusilarlo a la mañana siguiente.

Leyendo el Plan 2020, que firma Pablo Iglesias -su firma aparece en la portada del folleto-, he vuelto a recordar la cita, cuando, entre las páginas 10 y 11, se puede leer:

"En enero de 2014 Podemos era apenas un grupo de cuadros con experiencias intelectuales y militantes muy concretas... Aquel era el modesto patrimonio político de un equipo que a las ganas de cambio expresadas en el 15M y por múltiples iniciativas que no llegaban a configurar una alternativa electoral —como el Frente Cívico y otras experiencias— unía esta vez una figura mediática dispuesta a ponerse al frente. Hasta tal extremo era magra nuestra capacidad que nos vimos obligados a estampar la cara de quien escribe en una papeleta electoral"

La figura mediática dispuesta a ponerse al frente, a sacrificarse por la causa, era la misma que, sin quererlo, sin buscarlo, se sintió obligado a estampar su imagen en una papeleta electoral, y lo hizo por el bien de todos, por salvar a la gente, como el héroe que es Pablo Iglesias. 

La revolución ha comenzado, mañana será otro día.

martes, 15 de noviembre de 2016

¡Por España!


Durante las semanas en que se preparó la defenestración de Pedro Sánchez como Secretario General del PSOE, y la abstención socialista para investir presidente a Mariano Rajoy, hemos escuchado a casi todos los líderes de los partidos decir que lo hacían por España, mientras acusaban a Sánchez de pensar solo en sí mismo.

La realidad ha demostrado que ninguno, ni líderes, ni partidos en su conjunto, pensaban en otra cosa que en sus intereses particulares y partidistas.

En el PSOE, los partidarios de la abstención y su gestora a la cabeza, no pensaban en que unas terceras elecciones eran malas para España, pensaban en la debacle que les podía caer y en que si se retrasaba el proceso electoral un par de añitos, aunque solo sea unos meses, podrían recuperarse.

Iglesias y Podemos no pensaron en España cuando votaron en contra de la investidura de Pedro Sánchez tras las primeras elecciones, pensaron en sí mismos, pues creían que en las segundas superarían al PSOE. Pero resulta que, pese a absorber a IU, perdieron más de un millón de votos, que les fue bastante peor de la que esperaban, pero después, gracias a la gestora socialista, han quedado en una cómoda posición.

Y en el PP, ni Rajoy ni ningún otro pensó que a España le iría mal con unas terceras elecciones, pensaron solo en cómo seguir en el poder y, ahora, cuando han logrado una prórroga, mirando las encuestas, avisan que, o se hace lo que Mariano diga, o convocan elecciones, que ya no es malo para España convocar terceras, cuartas o quintas elecciones, ya controlan el tiempo.

De Rivera y Ciudadanos, ¡para qué hablar!  

martes, 8 de noviembre de 2016

Cristina Cifuentes y el piso de Pablo Iglesias


Cristina Cifuentes ha criticado a Pablo Iglesias Turrión por vivir en un piso de protección oficial, propiedad de su familia, a pesar de su nivel de ingresos.

Sin embargo, en el fragor de la denuncia aséptica y nada partidista, a Cifuentes, en un lapsus sin importancia, se le ha olvidado mencionar a diputados que, teniendo pisos en propiedad en Madrid, han estado cobrando dietas de alojamiento, con la excusa de que eran -y en muchos casos son- parlamentarios en representación de provincias.

Gente tan poco importante como Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, siendo diputado por Sevilla, propietario de tres viviendas en Madrid.
O Fátima Báñez, ministra de Trabajo, diutada por Huelva, con un piso en Madrid
O Rafael Hernando, portavoz del PP, diputado por Almería, con un piso en Madrid

Y así hasta 63 diputados en la legislatura 2011-2015 (41 diputados del PP, 20 del PSOE, 1 de CiU y otro de Coalición Canaria), sobresaliendo, de entre todos ellos, Elvira Rodríguez, que era por diputada del PP por Jaén, y propietaria de cinco viviendas en Madrid.

lunes, 31 de octubre de 2016

Jugaron a la ruleta rusa


Ya escribí el pasado sábado, tras escuchar a Mariano Rajoy, en ese momento candidato a presidir el gobierno, que lo había dejado claro, que gobernará como le de la gana y que después de escucharlo había que tener estómago para dejarle gobernar, absteniéndose en la votación.

Lo que ha pasado en el PSOE en los últimos días ha sido bochornoso, su voto facilitando el gobierno peperiano, absolutamente lamentable, y el histórico partido de Pablo Iglesias Posse ha entrado en una crisis que le va a ser difícil remontar.

Pero, dicho todo eso y mucho más, creo que no solo el PSOE tiene la culpa de que Rajoy tome hoy posesión de la presidencia del gobierno, hay otros responsables, entre ellos, de forma muy destacada Pablo Iglesias Turrión.

El sábado hubo intervenciones tan grotescas como inapropiadas. Que representantes de grupos políticos utilizaran su turno para atacar a los socialistas, en vez de hablar de su postura ante la candidatura de Rajoy, me pareció y me parece fuera de lugar, y más cuando se utiliza la protección que da la tribuna parlamentaria para insultar y agredir. Y lo hicieron quienes podían haber propiciado, allá por marzo de este mismo año, un cambio de gobierno. Si Podemos, Bildu o ERC hubiesen sumado algunos votos abstencionistas en la fracasada investidura de Sánchez, hoy no juraría su cargo Rajoy.

Pero Podemos, o mejor su comandante en jefe, Pablo Iglesias Turrión, jugó a la ruleta rusa, votaron no, convencidos, como estaban, de que en las segundas elecciones subiría su número de votantes, pero, pese a absorber a IU, perdieron, en conjunto, más de un millón de votos...

Y, hoy, también por eso, Rajoy vuelve a ser presidente para los próximos cuatro años, o el tiempo que él considere le conviene al PP.  

domingo, 11 de septiembre de 2016

Un titular sesgado

Ayer, al encender la televisión para ver las noticias, nos sorprendía -y, conociendo el tenor de sus declaraciones últimas, no debería-, nos sorprendía, repito, Felipe González con una de sus salidas: si hay terceras elecciones los candidatos de los partidos deberían cambiar, ser otros.

Naturalmente, los medios impresos se hicieron eco de las palabras de González, destacando en los titulares que, ante las hipotéticas terceras elecciones, el ex-presidente "pide que cambien los candidatos", titulaba El País, mientras que El Mundo ponía que González "sugiere a los candidatos del 26-J que se retiren", incluso más específico era el titular de ABC, que escribía "Felipe González pide a Rajoy, Sánchez, Iglesias y Rivera que no se vuelvan a presentar".

Pero, sorprendentemente -o quizás no-, Diario de Cádiz -y no sé si otros periódicos del Grupo Joly- en el titular de la noticia, ceñía la petición de González exclusivamente a Pedro Sánchez:




 

martes, 14 de junio de 2016

El debate


Soy de los que, como tantos, se aburrió en el debate y, pese a ponerle mucha voluntad, a duras penas aguanté hasta las doce.

Ni una idea nueva, cuatro bustos parlantes, cuatro poses diciendo lo mismo de siempre:

El primero: la herencia de Zapatero me persigue; gracias a mi España va bien; para gobernar hay que tener experiencia, no valen los becarios; no hay que arriesgarse, más vale malo conocido...

El segundo: Pablito es malo y no me dejó gobernar; los extremos se tocan; todo lo que dicen los demás iba en mi proyecto de gobierno, que la pinza de los extremos no permitió; es que Pablo me quitó la pelota...

El tercero: reflexione Mariano; los de este lado son malos, los de aquel corruptos, nosotros espíritus puros; esto es lo que dice este y lo que hizo el otro (mientras airea fotocopias); yo no tengo nada más que decir...

El cuarto: te equivocas de adversario; queremos mucho a Pedro, pero se confunde, tenemos que reeducarlo; somos la gente; no te equivoques ven a la verdad y te hacemos vicepresidente...

Ni una frase que no estuviera en el guión, ni una propuesta novedosas, ninguna sorpresa, nada que no supiéramos ya, ni un gesto de espontaneidad, salvo los tics de Rajoy y el cabreo de Iglesias con Rivera.

Y lo lamento sinceramente.

miércoles, 17 de febrero de 2016

Arrogancia política

No sé, exactamente, qué quiere decir Pablo Iglesias, el jefe de Podemos, cuando dice que Pedro Sánchez -que, según la normativa vigente, ha recibido el encargo de intentar formar gobierno-, debe dejar la arrogancia política.

La arrogancia es la cualidad del arrogante, por lo que, cuando se dice que una persona es arrogante, según el DLE (antiguo DRAE), decimos que es valiente, brioso, alentado..., también gallardo y airoso, aunque en su primera acepción es altanero, soberbio.

Pero, aunque como digo, no sé con precisión que acepción le quería dar Iglesias, muchos, entre los que me incluyo, hemos pensado que se refería a la primera del DLE, es decir, le ha dicho que deje la soberbia, la altanería política, lo cual, viniendo de quien lleva días diciendo que va a ser vicepresidente del gobierno y responsable de no se cuantos cargos más, sin que nadie capacitado se lo haya anunciado u ofrecido, es sorprendente, por no decir descarado.

domingo, 24 de enero de 2016

Garzón, Iglesias y la política desde el rencor


Me parece brillante y acertada la frase de Alberto Garzón de que no se debe hacer política "desde el rencor", pero no debería olvidar que Pablo Iglesias y Podemos han ninguneado, incluso han jugado, con IU y con sus votantes. Que Iglesias se negó a una confluencia pre-electoral en Unidad Popular y, tras las elecciones, a que IU pudiera formar grupo en el Congreso.

Ahora, Pablo Iglesias, como jefe de Podemos, rodeado de sus más fieles, realiza una de esas escenificaciones en las que son expertos, auténticos maestros de la teatralización de la política, e imponen sus condiciones, sus reglas, incluso el gobierno futuro, al PSOE, diciendo que también cuenta con IU. 

Me hubiera gustado escuchar a un Garzón, más tajante en la respuesta, que no mostrara su apoyo personal a la propuesta, sin haber consultado antes con el resto de la dirección de IU, con los seguidores de IU y más contundente al insistir que él debe mantenerse en el programa con el que se presentó a las elecciones, que es el mandato que le dieron sus votantes.  

La foto es del mitín de Alberto Garzón en Cádiz.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

Rajoy, entre el plasma y el fútbol


Mariano Rajoy está en camino de lograr su máxima aspiración: ser un presidente virtual, por encima del bien y del mal. Mariano piensa que solo con su presencia, con su karma, soluciona los problemas de España, mientras se dedica a comentar partidos de fútbol.

Él, Mariano, está por encima del bien y del mal, y de los mortales que le rodean, por eso, ante un proceso electoral que le aburre, que sabe que va a ganar por designación divina, no se molesta en debatir con los demás candidatos: frente a Pedro Sánchez, Albert Rivera y Pablo Iglesias, estará Soraya Sáenz de Santamaría, que Rajoy cree que con su segunda de a bordo es suficiente.

Aunque, quizás, en el PP han pensado que es mejor que vaya la vicepresidenta, que Soraya si se lee los papeles y sabe debatir, mientras tanto, que Mariano se fume un puro y debata sobre la Champions.