domingo, 11 de marzo de 2018

Otro tonto

El tonto podía pintarse la cara, o las paredes de su casa y no la fachada del rectorado, en la calle Ancha.

2 comentarios:

Ana dijo...

Esta pintada quedaría mucho mejor tatuada en el escroto del enamorado estulto. Y quizá lograra mejor lo que pretende: convencer a su amada de que la quiere tanto que ha sufrido y ha pagado por decírselo. Que suframos los demás y paguemos el arreglo con nuestros impuestos, eso no tiene mérito ninguno, ¡Fantoche!

ram dijo...

Totalmente de acuerdo con Ana, pero con un pequeño matiz:
El tatuaje en el escroto, grabado a fuego lento.
Martín