He defendido y, pese a las dudas que suscitan determinados 
comportamientos, sigo defendiendo la dignidad de la labor política, del 
trabajo de los políticos. Pero también debo decir que cada día me 
aburren más algunas actitudes y, sobre todo, las reiteradas y 
previsibles declaraciones que los de uno y otro signo realizan tras un 
anuncio o una realización. El penúltimo ejemplo destacable lo tenemos 
con la publicación de los presupuestos del Estado y de Andalucía para el
 año 2013. Escuchar al responsable de la elaboración de los presupuestos
 y a los portavoces del partido gobernante, en España y en Andalucía, y,
 a continuación, lo que dicen los portavoces de la oposición en 
Andalucía y en España, es constatar, una vez más, que los políticos son 
los que mejor uso hacen de ese dicho que asevera que "todo es según el 
color del cristal con que se mira", o a ese otro que habla de la botella
 medio llena, o medio vacía. Y, tan acostumbrados estamos a que su 
discurso cambie según estén gobernando o estén en la oposición, que 
parece que ya no importa. 
El gobierno de Mariano Rajoy ha presentado para 2013 unos 
presupuestos que, por ejemplo, recortan las prestaciones del desempleo 
en un 6,3%, el presupuesto de Sanidad en un 22%, un 3,8% en becas y 
ayudas al estudio, la dotación del Ministerio de Fomento desciende un 
17,6 %, Educación, Cultura y Deporte un 17,2 %..., y tras anunciarlo el 
ministro de Hacienda, Montoro, afirmó en el Congreso de los Diputados 
que los presupuestos del año 2013 son "los más sociales de la 
democracia". Naturalmente las críticas de la oposición no se han hecho 
esperar y, desde el PSOE, tanto Pérez Rubalcaba, como Soraya Rodríguez, 
han afirmado que las cuentas para 2013, que están ligadas a las medidas 
impuestas por Bruselas, no son creíbles y son injustas, por lo que 
consideran que el Gobierno miente en el porcentaje del gasto social, que
 desciende más de lo anunciado por el ejecutivo de Rajoy, destacando la 
reducción en Sanidad y en Educación.
En Andalucía, el Consejo de Gobierno de coalición con IU que 
preside José A. Griñán, ha aprobado el presupuesto de la Comunidad 
Autónoma para 2013, que supone una caída del 4,1% respecto a las cuentas
 de 2012, destacando que la inversión desciende un 20% y las políticas 
sanitarias y sociales bajan un 9,7%. La consejera del ramo, Carmen 
Martínez Aguayo, ha declarado que son unos presupuestos de resistencia 
ante la crisis, "para combatir la desigualdad; garantizar el 
sostenimiento de la red de servicios públicos fundamentales, y situar a 
la educación como centro de la política económica e instrumento de 
igualdad". Los dirigentes del PP andaluz han calificado las cuentas 
andaluzas de injustas y antisociales, afirmando que son una tomadura de 
pelo a los andaluces, engañándolos en el gasto social.
¡Qué aburrimiento! ¡Qué pesadez! Es lo de siempre. En Madrid 
unos ven la paja en el ojo ajeno, mientras no ven la viga en el propio. Y
 en Sevilla, viceversa. Y esto seguirá así mientras los electores, 
nosotros, no tomemos medidas y les recordemos a los políticos sus 
palabras, por ejemplo, cuando acudamos a votar. Así, seguramente, 
cuidarían más la coherencia de sus discursos y nosotros nos aburriríamos
 menos.
Publicado en Diario de Cádiz, 10 de noviembre de 2012. 
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