martes, 30 de octubre de 2012

Padres de la Constitución de 1978

Hoy a las 19 horas, en el Oratorio de San Felipe Neri, la Universidad de Cádiz nombrará Doctores "Honoris Causa" a los denominados "padres de la Constitución de 1978": Miguel Herrero Rodríguez de Miñón, José Pedro Pérez-Llorca y Gabriel Cisneros, por la UCD; Manuel Fraga Iribarne por AP; Miquel Roca i Junyent por CDC; Gregorio Peces-Barba por el PSOE y Jordi Solé Tura por el PCE-PSUC. De los siete, cuatro lo recibirán in memoriam (Fraga, Cisneros, Solé y Peces-Barba); los otros tres en persona.



Estos siete hombres representan el consenso político se la Transición a la democracia en España, resultado del cual fue la Constitución actual, que definió a España como una monarquía parlamentaria en un Estado social y democrático de derecho, y estableció el sistema autonómico de las nacionalidades y regiones, hoy tan cuestionado.

El homenaje a los "padres" y a la Constitución de 1978 en sí misma, no debe hacer olvidar que, en la actualidad, se hace necesario una reforma, una adaptación del texto constitucional. 


La de 1978 es una Constitución de larga y fundamental trayectoria, con capacidad, por ejemplo, para adaptarse al marco jurídico y político impuesto en 1992 en el Tratado de Maastricht que fortaleció la Unión Europea. Pero el desarrollo político interno ha ido forjando carencias, que si no lo fueron hace más de tres décadas, si lo parecen ahora, como un sistema electoral que ha configurado un sistema bipartidista, que, sin embargo otorga a los nacionalistas un papel esencial en la gobernabilidad del Estado. Por eso, periódicamente, reaparece la cuestión del federalismo. Si esta cuestión, que precisaría de la reforma constitucional, se retrasa, hay otras más simbólicas, como garantizar la igualdad de hombres y mujeres en el acceso a la Corona, que no tienen excusa para no ser aboradadas ya.
  

2 comentarios:

Jesús dijo...

Una pena no haberlo hecho 5 años antes, pero más vale tarde...

Jaime dijo...

Tambien las necesarias reformas parece que van a llegar tarde. En este pais, todavia España, no hay prisa para nada y menos para lo que precisa de un amplio consenso de los partidos políticos. Estan muy bien asi y tienen miedo a perder tano privilegio y puesto de trabajo.