Al paso que van, pronto el Oratorio de San Felipe será una iglesia de los tiempos del Antiguo Régimen, y no me refiero a los tiempos de la dictadura franquista, hablo de la época de la sociedad estamental y el poder despótico de los absolutismos.
Primero fue, nada más terminar el Bicentenario de la Constitución de 1812, convertir el Oratorio en el principal símbolo del fracaso de la conmemoración, para inmediatamente intentar ocultar que en San Felipe se elaboró la primera Constitución española, pero en vez de proclamarlo con orgullo, todo lo contrario, es que ni se nombra la celebración de las sesiones de Cortes entre sus muros.
Y ahora, un nuevo gesto representativo del retroceso de la imagen del Oratorio.
A mi me da igual que vuelvan a Cádiz las misas que llaman "de rito tradicional", que retornen los rituales anteriores al Concilio Vaticano II, pero me parece muy significativo -y en absoluto casual, ni inocente-, que el obispo escoja el Oratorio para sus celebraciones. De esta manera, el templo donde se alumbró la modernidad política y social de España, vuelve atrás. Ya no será conocido como un monumento constitucional, lo será por acoger un nuevo gesto reaccionario, y esta vez en latín.
Esto acabará, con el oficiante detrás del ara. Quizás Ud. y yo no lo veamos pero indica ese destino tal y como la religión sigue imperando en nuestra sociedad.
ResponderEliminarOtrosi: El Sr. Esteban, D. José María, conocido e interlocutor de Ud. en alguna ocasión, se expresa hoy en el D.de C. con la recuperación de la piedra ostionera para la defensa de las murallas del paseo del Vendaval. En artículo anterior, Ud. se publicó, basándose históricamente, en las obras llevadas a cabo para defender el frente del sur, suroeste.
¿Qué opina Ud. de estas actuales manifestaciones de este arquitecto-tipo de la contraria por salida?.
Su opinión me interesa mucho, por docta, sabia e instruida. Le quedaré agradecido.
Anónimo, mi experiencia es tan personal, como directa, sin documentación acreditativa, así que si quiere conocer mi opinión, póngase en contacto directo conmigo.
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