Pendiente de inauguración oficial, una nueva plaza en La Viña, la del Corralón, con seis bancos de forja, perfectamente acondicionada para dias como hoy, en los que el viento de levante destaca el carácter natural y ecológico de la obra acometida por el ayuntamiento presidido por Teófila Martínez.
Digamos que farolas no hay ninguna, ni focos, ni forma alguna de iluminación que no provenga de la que ya estaba en la calle. Pero en cuanto a palmeras, sólo falta una esquina. Esperemos que la empresa que suministra estos árboles al Ayuntamiento, no se retrase más de la cuenta y quede la plaza bien conjuntada. Y las farolas si se ponen, no es preciso que sean isabelinas [aunque estamos hablando de la Plaza de la Reina] ni fundidas en Sevilla. Alguna fea habrá disponible en el almacén municipal. A esos viñeros que no pagan contribución ni tienen limpias las calles, ni agua. Por cierto, lo último: una fuentecita, por caridad.
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