El peso de la púrpura

Dicen algunos medios de comunicación que el gobierno de Mariano Rajoy está pensando no realizar este año, en 2012, el "debate de la nación", es decir, el debate de política general sobre España, sobre la situación política, económica, social y administrativa de España, el debate en el que el Gobierno da cuentas de sus actuaciones y los partidos de la oposición pueden pedir explicaciones, aclaraciones, criticar la acción gubernamental y ofrecer alternativas. Un debate que, desde 1983, se desarrollaba habitualmente antes de las vacaciones de verano.
Al parecer, desde círculos cercanos a La Moncloa argumentan que, como el gobierno tomó posesión a finales de 2011 -y retrasó a conciencia los presupuestos generales, pensando en las elecciones andaluzas, añado yo-, y que, como consecuencia de ello en el año 2012 habrá dos debates sobre la situación económica, el de los presupuestos para este ejercicio y el de las cuentas de 2013, no es necesario otro debate general. Quizás, también añado yo, para evitar que el presidente Rajoy se canse con tanto trabajo.
En junio de 2012, fecha habitual de los debates de la nación, el gobierno llevará más de siete meses tomando decisiones -recortes sociales- que afectan directamente al bienestar y los derechos de los españoles, y Rajoy debería explicarlo, pero seguramente ahí radica el problema, en qué y cómo explicar a los españoles las medidas que se están adoptando, eso es lo que tratan de evitar.  
El PP y Mariano Rajoy acaban de empezar a gobernar y, parece, que tratan de eludir el debate democrático, el debate con los otros representantes legítimos de buena parte de los españoles. Si en seis meses ya piensan así, ¿qué harán cuando sientan el peso de la púrpura en toda su dimensión?