Nos movemos entre el pensamiento Dostoyevki si Dios ha muerto todo está permitido y la banalidad del mal que señalaba Hanna Arendt. O la cínica frase de Stalin, respecto a que un muerto por asesinato es una tragedia y un millón es solo una estadística. Y así gira mundo como diría el tango , en su espacio infinito.
Nos movemos entre el pensamiento Dostoyevki si Dios ha muerto todo está permitido y la banalidad del mal que señalaba Hanna Arendt.
ResponderEliminarO la cínica frase de Stalin, respecto a que un muerto por asesinato es una tragedia y un millón es solo una estadística.
Y así gira mundo como diría el tango , en su espacio infinito.