Si es cierto que durante un corto período de su vida -entre los 20 y los 23 años- formó parte de Falange, también lo es, como escribe Miguel Soler, que tuvo el inmenso mérito de "haber modificado leyes antediluvianas en España y originar un debate nacional sobre la cuestión femenina en plena dictadura tras haber publicado en ABC, el 7 de noviembre de 1953, el artículo “El domicilio conyugal”, que estuvo tres meses retenido por la censura. En él, denunciaba la violencia de género en un momento en el que estos casos se silenciaban. Sus ecos llegaron hasta The New York Times y la revista Time, que elogiaron su brillante actuación".
Quienes desde el gobierno municipal decidieron en el año 2015 retirar su busto de la plaza del Palillero, aludiendo exclusivamente a su militancia falangista, desconocían, y si lo sabían no quisieron recordar que Formica "defendió la plena capacitación de la mujer en el mundo laboral a todos los niveles en época de fuerte represión, y apoyó las tesis de Simone de Beauvoir, a quien reseñó en 1950, cuando El segundo sexo estaba censurado en el país".
En su artículo, Miguel Soler pide al ayuntamiento que rectifiquen el error cometido -la injusticia, añado yo- con Mercedes Formica, y se dirige de manera especial a las concejalas de Feminismos y Cultura, Lorena Garrón y Lola Calzalilla, petición a la que me sumo.
Aquí pueden leer el artículo de Miguel Soler.
Apoyo totalmente esta iniciativa. Esperemos alguien la tenga en consideración.
ResponderEliminarYo también me sumo y denuncio la ignorancia y el sectarismo con que nuestras concejalas ¿feministas? quieren condenar al olvido a quién verdaderamente se batió el cobre en defensa de los derechos de la mujer en tiempos más que difíciles para dicha causa.
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