Visitas al Teatro Romano

No me sorprende, y me alegra, que el Teatro Romano, con solo seis meses de apertura, se haya convertido en el tercer enclave cultural, gestionado por la Junta de Andalucía en la provincia de Cádiz, en número de visitas, 97.254 en el año 2016. 

Además de un tardío, pero merecido, tirón de orejas a los gestores políticos de la Junta -por su tardanza inexplicable en reabrirlo-, es un reconocimiento a la importancia del yacimiento y a la labor de los profesionales de la arqueología y la historia que en él han trabajado y trabajan. 

Ahora convendría insistir en una idea que no tiene nada de novedosa, incluso que se repitió como propuesta de turismo cultural en el año 2014, y es la necesidad de establecer un circuito cultural y turístico que unifique, en un solo recorrido, incluso con una sola entrada, el yacimiento Arqueológico Gadir, en la calle San Miguel, la Fábrica de Salazones, en Sacramento -donde la Junta debe lograr un horario normalizado de apertura, pues no es fácil saber cuándo se encuentra abierto-, el Teatro Romano, los restos fenicios que están permanentemente cerrados debajo del tinglado Entrecatedrales y el Museo de Cádiz, que ha alcanzado las 96.683 vistas el pasado año.