Demasiados metros solo para aparcamiento.

Foto de Diario de Cádiz

En El triunfo de las ciudades -un libro de lectura recomendable- Edward Glaeser defiende que las ciudades son más ecológicas que los poblamientos dispersos, debido a que los habitantes de la ciudad usan menos el coche propio para desplazarse, recurriendo al transporte público, incluso a caminar.

He recordado a Glaeser cuando leía que el ayuntamiento, en vista de que la Junta de Andalucía no va a construir un nuevo hospital en el solar de la antigua Aeronáutica -lo que se evidenció cuando se hizo cargo del de San Carlos, en la vecina San Fernando- ha solicitado a la Zona Franca el terreno para usarlo como bolsa de aparcamiento, petición que tiene como precedente que se pidió a la Junta los terrenos del también abandonado proyecto de la Ciudad de la Justicia, y a la que ha seguido la del solar del antiguo Gobierno Civil, en los tres casos para darle el mismo fin: bolsa de aparcamiento.

En el primer caso, se trata de más de 37.000 metros cuadrados -en otras ocasiones se habló de casi 50.000-, y a los que se unirían otros varios miles de los otros dos solares solicitados, demasiados metros para dedicarlos solo a aparcamientos.

Como han repetido varias voces, Cádiz no necesita más coches, no conviene fomentar el uso del vehículo privado, antes al contrario, hay que dar preferencia al transporte público.

Y por otra parte, Cádiz tiene un parque de viviendas excesivamente caro. Quizás convendría dedicar buena parte de esos terrenos a la construcción de pisos de carácter social, para abaratar precios, mejorar la habitabilidad urbana y crear espacios de desarrollo social y económico, como se ha hecho en otros lugares. Por ejemplo, en Iquique, Chile, con el proyecto Quinta Monroy, que aúna viviendas sociales y espacios para el trabajo productivo. O como se hizo en Medellín, Colombia, convertida en modelo de ciudad creativa, donde la búsqueda de la equidad, el crecimiento económico y la planificación urbana, han permitido crear espacios con calidad de vida, en los que sus habitantes puedan desarrollarse de una manera sostenible.