José Manuel Rodríguez Gordillo

Ha muerto José Manuel Rodríguez Gordillo, "Jose Gordillo", mi primer introductor en la investigación historiográfica, un maestro y, sobre todo, amigo, desde que lo conocí a principios de los años setenta. Él fue quien, en segundo año de carrera, me incitó a la investigación, quien me propuso, terminada la licenciatura en Historia, trabajar sobre la desamortización en Cádiz, y también fue Jose Gordillo quien -cuando por un cambio en la organización académica de los departamentos universitarios, se decantó por el área de Historia Moderna-, me aconsejó que me acogiera a la dirección de don José Luis Comellas, su maestro y el mío. 

Antes, colaboré con él en algunas pesquisas sobre el Cádiz isabelino y, posteriormente, pese a que yo me decanté por Historia Contemporánea y él, poco a poco, sin dejar la docencia de Historia Moderna en la universidad de Sevilla, se fue centrando en su tarea como archivero de la Fábrica de Tabacos de Sevilla, nunca perdimos el contacto, la amistad y siempre reconocí su magisterio.

Jose Gordillo fue reconocido, internacionalmente, como uno de los mejores especialistas en la historia del tabaco, con trabajos imprescindibles sobre el establecimiento del estanco del tabaco en España, sobre su comercio internacional, sobre la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla y sobre su sucursal gaditana.

Uno de los temas que siempre le interesó, especialmente, es el de la importancia de las cigarreras en el tratamiento del tabaco para su consumo, por eso me consta que uno de los momentos más felices de su trayectoria investigadora fue cuando, en el año 2012, ganó el Premio de Biografías Antonio Domínguez Ortiz con su estudio Carmen. Biografía de un mito, un trabajo dedicado a desentrañar las raíces históricas del personaje que universalizó Mérimée, situándolo en el contexto sociocultural de la España de la primera mitad del siglo XIX. 

Apasionado en la investigación, vital y optimista, de buen humor, fue un amigo constante con quien, pese a la distancia y largas etapas sin vernos, nunca perdimos el contacto y el afecto. En nuestra última conversación, hace unas semanas -sobre el comercio del tabaco de Virginia-, pospusimos repetir un encuentro, con Marga, su mujer, y Marieta, que ya no tendrá lugar. Jose, que la tierra te sea leve.