Se ha criticado bastante en algunos foros que el ayuntamiento -quizás la propia alcaldesa- haya decidido colocar, en el monumento a Moret, una placa recordando que la remodelación de la plaza de San Juan de Dios se hizo bajo su mandato municipal.
Sinceramente, no creo que esto sea motivo de crítica. Colocar ese tipo de placas ha sido, y es, una costumbre muy común entre instituciones y políticos. Por no rebuscar demasiado, basta recordar que cuando se remodeló la Alameda de Apodaca, tanto entre 1926 y 1928, como entre 1983 y 1987, se colocaron sendos azulejos, prácticamente iguales, recordando, en el primer caso al ayuntamiento presidido por Agustín Blázquez, y en el segundo por Carlos Díaz.
Además, hay que reconocer que en el caso de Teófila Martínez y San Juan de Dios, han sido bastante prudentes en la colocación de la placa, que apenas se ve desde lejos
destacando la que alude a la alcaldía de Cayetano del Toro, sobre la que alude a Teófila y al Bicentenario
Al final va a tener razón el título de ese libro que dice "Todos los ayuntamientos son iguales". Supongo que también influye como caiga cada uno, es cierto. Pero creo que aunque antes se hiciera, eran otros tiempos, con o sin democracia, y que escribir el propio nombre en letras de molde es propio de... un personaje público con la suficiente cara dura, y acostumbrado a oír que es el mejor; es decir:
ResponderEliminarno es por nada hoy he pasado por allí y la placa no tiene dignidad ninguna.... pues esta echo un chapuz asquerosa mente malo y encima pegado así a lo basto a ver si puedes denunciarlo también aquí y le echas fotos....un saludo!
ResponderEliminarLa crítica vino dada no a la placa en concreto, creo recordar que se debió la acentuación del "fue". Un poco de pintura solucionó el tema.
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